La solicitud de la Cámara de Representantes de renuncia de los delegados uruguayos en la Comisión Técnica Mixta (CTM) de Salto Grande, en particular de los designados de forma directa, llegó este jueves a la Torre Ejecutiva, pero aún no se ha tomado ninguna decisión. Así lo expresó el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, en una rueda de prensa este viernes, en la que dijo que la situación se va a “analizar”, tal como lo planteó el presidente Luis Lacalle Pou el miércoles, tras la interpelación a los ministros Francisco Bustillo (Relaciones Exteriores) y Azucena Arbeleche (Economía y Finanzas).

Delgado planteó que, “hasta ahora”, lo que está decidido es promover el proyecto de ley propuesto por Bustillo sobre “la jurisdicción, las competencias y la discrecionalidad de las comisiones binacionales”. El jerarca afirmó que ya hay “un borrador” de la propuesta sobre el que se está trabajando y que aún resta definir si se promulgará por medio de un decreto o de una resolución.

Consultado sobre la pertinencia de que hubiera un representante de la oposición en la delegación uruguaya de la CTM, ya que en este período no hubo, Delgado sostuvo que eso “puede ser” una de las “enseñanzas” del episodio. Sin embargó, recordó que en el primer mandato de Tabaré Vázquez (2005-2010) “no hubo representantes de la oposición en ningún organismo público. Tenía mayoría propia en el Parlamento y no hubo control de la oposición en ningún organismo”. Señaló que la situación cambió con el gobierno de José Mújica, pero se “limitó” en el segundo mandato de Vázquez.

“La participación de la oposición para mí siempre es buena”, dijo Delgado. No obstante, reconoció que este gobierno optó por limitar la participación del Frente Amplio “más o menos lo mismo en cantidades que lo que se hizo, a espejo del gobierno de Vázquez”.

Sobre su conocimiento acerca de las designaciones directas, Delgado –que integra Aire Fresco, el sector al que pertenece el expresidente de la CTM Carlos Albisu– dijo: “En la operativa de Salto Grande estoy en líneas generales, no sobre el detalle”.

“Me parece que es una buena oportunidad de pensar para más adelante. Yo podría hablar de lo que pasó en el período pasado, el anterior y el anterior, pero no me quiero quedar en eso, quiero mirar para adelante”, expresó. Y continuó: “A esta altura, nadie discute que no hay ilegalidades, porque Salto Grande, como las otras binacionales, tiene una jurisdicción especial en la que no hay ni ilegalidades ni irregularidades; puede haber discrecionalidad y puede haber abuso de la discrecionalidad, y me parece que son de las cosas que este tipo de situaciones nos da la oportunidad de cambiar para adelante”.

Asimismo, dijo que esto no sólo tiene que cambiar en Uruguay, sino también en Argentina, y que la cancillería va a plantearle al país vecino que Uruguay va a presentar “por lo menos un marco jurídico de designación de los delegados, acorde a una legislación uruguaya”. Esa norma “va a estar prevista en el proyecto de ley que el Poder Ejecutivo anunció que va a ir al Parlamento”, señaló.

Horas más tarde, en otra rueda de prensa, el secretario de Presidencia fue consultado por el hecho de que la Junta Departamental de Salto votó en el mismo sentido que el Parlamento, y afirmó que respecto a eso “no hay dos lecturas” posibles. Si bien “es una señal” a nivel político, hay que considerar que en las juntas departamentales “tienen mayoría los intendentes correspondientes”, argumentó.