Juntos, el Mercosur y la Unión Europea difundieron este jueves un comunicado en el que aseguran que “en los últimos meses” existieron “avances considerables” con relación al acuerdo comercial que ambos bloques negocian desde 1999. La declaración se divulgó al término de la LXIII Cumbre del Mercosur, que tuvo lugar entre miércoles y jueves en Río de Janeiro, Brasil.
La Unión Europea y el Mercosur “están involucrados en discusiones constructivas con miras a concluir los asuntos pendientes en el acuerdo de asociación”, sostiene el comunicado conjunto, y agrega que “las negociaciones continúan con la ambición de concluir el proceso y alcanzar un acuerdo que sea mutuamente beneficioso para ambas regiones y que responda a las demandas y aspiraciones de sus respectivas sociedades”.
“Ambas partes esperan alcanzar prontamente un acuerdo que se corresponda con la naturaleza estratégica de los lazos que vinculan a ambas partes y la crucial contribución que pueden ofrecer para tratar los desafíos globales en áreas tales como el desarrollo sostenible, la reducción de la desigualdad y el multilateralismo”, concluye la declaración.
El acuerdo comercial, que prevé la creación de una zona de libre comercio entre 700 millones de personas, tuvo un primer avance a nivel político cuando, en junio de 2019, los entonces presidentes Mauricio Macri (Argentina), Jair Bolsonaro (Brasil), Mario Abdo Benítez (Paraguay) y Tabaré Vázquez (Uruguay) comunicaron que habían cerrado el acuerdo comercial. No obstante, todavía restaba una revisión legal del texto y la posterior ratificación del acuerdo en los parlamentos de los 32 países de los dos bloques.
Según Lula, el acuerdo “aún es insuficiente”
Previo a la Cumbre del Mercosur, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, había pedido “paciencia” a la región, y también había advertido que si el acuerdo no se concreta en 2023, “no será por falta de voluntad de los sudamericanos, sino por el proteccionismo de los europeos”, que “no quieren hacer un acuerdo con la perspectiva de hacer concesiones”, mientras que el presidente francés, Emmanuel Macron, había expresado que el texto del acuerdo quedó “obsoleto” e “incompatible” respecto a las actuales políticas ambientales de Europa. “No puedo pedir a nuestros agricultores, a nuestros industriales en Francia y en toda Europa que hagan esfuerzos para descarbonizar y luego decir que elimino todos los aranceles para introducir productos que no aplican estas reglas”, señaló.
Con todo, Lula sostuvo este jueves en la Cumbre del Mercosur que “el texto que tenemos ahora es más equilibrado que el firmado por los anteriores gobiernos”, aunque “aún es insuficiente”. Afirmó que el acuerdo alcanzado en 2019 era “inaceptable”, porque ”nos trataban como seres inferiores, países colonizados, con una gran falta de respeto”.
Lula, que este jueves le entregó la presidencia pro témpore del Mercosur a su par paraguayo, Santiago Peña, lamentó no haber cerrado los detalles técnicos del acuerdo comercial durante su gestión. Afirmó que “nunca antes en la historia del Mercosur se conversó con tanta gente”, pero de todos modos “no hubo flexibilidad” por parte de la Unión Europea.
A su turno, Peña le agradeció a Lula los “esfuerzos” que hizo “para cerrar un acuerdo después de más de 20 años” de negociación. Sin embargo, sostuvo que “ha llegado el momento de que nosotros digamos [que] ya es suficiente”. Afirmó que “los grandes logros no van a venir desde afuera”, sino “desde adentro”, desde “la región del mundo que tiene mayor potencial”. “Estoy convencido de que nuestra región está condenada al éxito”, agregó.
Por su parte, en sus últimos días como presidente argentino, Alberto Fernández sostuvo que el acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea es “imprescindible” en términos geopolíticos “para no quedar atrapados en la bipolaridad de China y Estados Unidos”. No obstante, puntualizó: “Que sea imprescindible exige que nos sirva a todos, que es un pacto donde todos ganemos, porque si va a ganar uno y el resto va a perder, no es un buen pacto”.
En tanto, el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, dijo que es “muy escéptico con respecto al acuerdo”, aunque también valoró, al igual que Peña, el “gran esfuerzo” que hizo en el último tiempo Lula para avanzar en la negociación.
Ingreso de Bolivia y acuerdo con Singapur
Lo que sí se efectivizó este jueves en la Cumbre del Mercosur fue la incorporación de Bolivia como miembro pleno del bloque regional; ahora Bolivia deberá adaptar en cuatro años su legislación a la del resto de los países miembros. Asimismo, el Mercosur firmó un tratado de libre comercio con Singapur, mediante el cual ambas partes se comprometieron a reducir los aranceles para las importaciones y exportaciones.