El miércoles, el directorio de OSE anunció nuevos parámetros para las condiciones del agua potable como consecuencia del déficit hídrico, tema sobre el que la compañía estatal advierte desde hace meses. Si bien el presidente de OSE, Raúl Montero, aseguró a la diaria que los cambios no afectarán la salud de los consumidores, sí tendrán efectos sobre el sabor.

De acuerdo con la norma UNIT 833/2008, sobre los requisitos del agua potable, el valor admitido de cloruro en el agua es de 250 miligramos por litro, cifra que con esta medida aumentará a 450 miligramos, mientras que el sodio pasará de 200 miligramos a 280. Esto quiere decir que se suministrará con “más salinidad”, por encima de lo admitido por dicha norma.

Luego de los anuncios de OSE, el senador del Frente Amplio (FA) Enrique Rubio publicó este jueves en Twitter que el “estado de confusión es grande” y criticó que las autoridades de OSE “no informaron que la crisis seguía”. Además, apuntó que se desconoce el informe del Ministerio de Salud Pública (MSP) que autorice los cambios en los parámetros del agua potable y qué aspectos pueden afectar la salud humana. “Tendrán que explicárselo al Parlamento”, agregó.

El senador frenteamplista dijo a la diaria que considera pertinente convocar a “algún ámbito del Parlamento”, en conjunto, a las autoridades de los ministerios de Salud Pública y Ambiente y a la dirección de OSE, para que den “explicaciones” sobre las decisiones adoptadas. Rubio sostuvo que no descarta que se promueva una citación a comisión o una interpelación, pero que eso se determinará con la bancada de senadores, cuando vuelvan a reunirse tras el feriado del 1° de mayo.

Rubio apuntó que el informe de la gerencia general de OSE que expide estas medidas plantea que se trabajó con un “grupo interdisciplinario” en el que participaron el MSP y otras entidades, pero, sin embargo, dice a “texto expreso” que Salud Pública “no va a hacer un informe a favor de las medidas, sino que las evaluará después”. “No sabemos cuál es la opinión última de Salud Pública, por lo menos de forma comprometida”, manifestó.

En ese sentido, para el senador del FA “hay que pedirle al MSP que haga un pronunciamiento nítido sobre esta cuestión, porque es el organismo de referencia en estos temas”. Para el legislador, la falta de una “explicación técnica y didáctica” sobre el tema ha generado un estado de “gran confusión en la población”. Por ese motivo, consideró que es necesaria una comunicación pública que plantee de forma clara cuál es el agua potable y no potable, así como en qué situaciones puede haber un riesgo para el consumo humano. Uno de los aspectos que más preocupan a Rubio es el aumento de la salinidad del agua.

Asimismo, el senador cuestionó que estas medidas se hayan informado después de un período de “silencio” de la compañía, de “unos 15 o 20 días, en los cuales OSE no comunica nada sobre que estábamos en una situación de déficit hídrico extraordinariamente importante para el consumo humano”. “Ese silencio hizo pensar a la gente que las lluvias que habían acaecido habían solucionado el problema o [que este] estaba en vías de solución y, repentinamente, OSE tiene que comunicar medidas drásticas como levantar los parámetros. Eso tiene como consecuencia un estado de gran confusión en la población”, expresó.

“Acá hay una larga secuencia que comienza con la falta de inversiones de OSE, al no haber hecho la represa de Casupá, que ya estaba pronta para la convocatoria, y, a su vez, el debilitamiento del organismo en materia de recursos humanos y en otros campos”, expresó Rubio. A estos aspectos agregó como una preocupación el “rumbo” que tomó la compañia estatal con el cuestionado proyecto Neptuno, que “no sabemos en qué punto está”.

No obstante, Rubio aclaró que el cuestionamiento “no es a las medidas de emergencia”, sino a “cómo se llegó a ellas por el manejo del déficit hídrico, [a] las consecuencias sanitarias de las medidas y [a] las decisiones políticas sobre las soluciones a futuro de priorizar el proyecto Neptuno, a un enorme costo [y] que no soluciona” el problema.

Montero: “Si tengo que hacer un mea culpa, lo hago”

Las medidas adoptadas por OSE permitirán mantener el abastecimiento de agua durante mayo en el área metropolitana, donde el déficit hídrico se agudizó en las últimas semanas. Sin embargo, esta situación no había sido advertida públicamente por las autoridades de la compañía. En ese sentido, Montero hizo un “mea culpa” por no haber “comunicado bien” esto a la población.

“Si tengo que hacer un mea culpa, lo hago. Puede ser que nosotros nos hayamos comido la crisis estas últimas dos semanas y que no hayamos tenido una buena comunicación de que el tema se iba a ir agudizando”, dijo el presidente de OSE este jueves en una entrevista con el periodístico Doble click. “Ahora estamos en una situación en la que nos vimos obligados a salir a la cancha de vuelta con un comunicado”, agregó.

Montero reconoció que había una “sensación en la gente” de que “el tema se había terminado”, pero enfatizó que eso no es así en varias zonas del país. En esa línea, sostuvo que hay “tres niveles” de déficit hídrico: “Una cosa es que los campos estén verdes porque empezó a llover, otra cosa es que empiece a sobrar agua de los campos y empiece a correr por las cañadas, y otro nivel mayor es que haya agua como para que se infiltre en los acuíferos y tengan agua. Nosotros estamos recién llegando al primer nivel”, expresó.