Fue en agosto de 2022 cuando un circular de la Dirección Nacional de Vivienda (Dinavi) -firmado por su titular, Jorge Ceretta- del Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (MVOT) informó de la instrumentación de dos procedimientos: uno “ante derivación de los casos recibidos por las autoridades del MVOT” y otro “para realizar adjudicaciones directas en los complejos habitacionales”.

Se trata de los siete pasos que tiene que seguir una situación presentada a la Dinavi para que la persona o familia en cuestión sea adjudicataria de una vivienda cuando el pedido viene desde autoridades ministeriales. Sin embargo, más allá de estos pasos, se define que la decisión final es de la ministra, Irene Moreira.

Incluso antes de que existiera este protocolo, la ministra hizo cinco adjudicaciones entre 2021 y 2022, entre ellas, el apartamento en el complejo de las calles Nueva York y Yi, que derivó en el pedido de renuncia por parte del presidente de la República, según informó El País.

El dato se desprende de un informe que llevó Moreira a la reunión en la Torre Ejecutiva con el mandatario y el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, el cual contiene una lista de adjudicaciones hechas con base en las “reservas de cupos” en “situaciones excepcionales”.

Además de la adjudicación de público conocimiento, una mujer a cargo de un menor de siete años accedió a una vivienda en Belvedere. Otra mujer fue adjudicataria, también a pedido de Moreira, de una casa de tres cuartos en la zona de Burgues y Aparicio Saravia; en este caso, era una jefa de hogar con dos hijos adolescentes. De acuerdo con El País, esta es la única situación en la que se constató que la mujer sufría violencia de género.

Un hombre con un hijo de 23 años también fue beneficiario de una casa en la calle José Cabrera y, finalmente, una mujer de Rivera recibió una vivienda de cuatro dormitorios.