El ministro de Ambiente, Robert Bouvier, informó esta mañana que Google decidió no continuar con el proyecto de instalación de un data center en el Parque de las Ciencias, en Canelones. Allí Eleanor Applications SRL, empresa subsidiaria de Google, compró 30 hectáreas en 2021. En aquel momento anunciaban que la iniciativa estaba en proceso: “Si bien las perspectivas del proyecto son alentadoras, aún queda pendiente superar varias instancias antes de poder confirmar la construcción del centro de infraestructura”.

Pero este jueves Bouvier dijo en entrevista con Radio Sarandí que “el proyecto original, del que tanto se ha hablado, ya se retiró. No tenemos un proyecto de Google”. La consulta venía a raíz de la crisis generada por el déficit hídrico, ya que el proyecto del data center era cuestionado por distintas organizaciones de la sociedad civil porque podría consumir un máximo de 7.600.000 litros de agua potable por día. El centro funcionaría las 24 horas de los 365 días del año.

Bouvier contó que en una reunión que solicitó para interiorizarse del proyecto los representantes de la empresa le dijeron que “el proyecto iba a estar, no sé si suspendido o en una estructura”, que si bien no recordaba la palabra exacta que usaron estaría “en etapa de evaluación”, por lo cual “hoy por hoy no tenemos un proyecto de Google en el ministerio para evaluar”. “El proyecto tal cual estaba no se va a hacer”, añadió.

“Cuando se dijo que se retiraba se dijo que se iba a hacer un proyecto mucho más chico”, mencionó, y dijo que no sabía los motivos de la decisión empresarial: “Habría que preguntarle a la gente de Google por qué se retira”.

El jerarca reiteró que de esa iniciativa “no puedo hablar porque no hay nada”. Sin embargo, horas después, el ministro de Industria, Omar Paganini, dijo a Montevideo Portal que el proyecto “sigue en pie”, si bien coincidió con Bouvier en que se está buscando una alternativa respecto del proyecto original. En diálogo con la diaria, el subsecretario de Industria, Walter Verri, confirmó que la iniciativa se mantiene.

Según supo la diaria con base en fuentes ministeriales, la declaraciones de Bouvier no fueron recibidas con agrado en el MIEM. “No tenemos ninguna noticia de que el proyecto se haya suspendido, al contrario. Tenemos entendido que se sigue estudiando, es cierto que está en una etapa de reformulación, seguramente pensando en tener un consumo de agua menor”, apuntó Verri, quien aseguró que la situación actual es “coyuntural” y “transitoria” en lo que refiere a la reserva de agua en la zona metropolitana.

Por lo tanto, dijo, este proyecto no se ve afectado por la situación de la sequía que afecta esa zona del país. “Al contrario, el proyecto sigue adelante. No se ha confirmado la inversión, pero se han dado pasos que son alentadores para el gobierno de que esta inversión se termine realizando, y básicamente eso no ha cambiado”, sostuvo.

Al ser consultado sobre la decisión de la empresa de reformular su propuesta, dijo que es normal, puesto que estas “estas empresas se están reconfigurando en todo el mundo, no hay ninguna novedad, seguramente quieran hacer un proyecto mejor, más chico, más grande, no lo sabemos. La inversión aún no está confirmada, lo que está confirmado son pasos que se han dado que hacen pensar que se sigue adelante con el proyecto”, afirmó.

Verri recordó que Google ya compró el predio en el Parque de las Ciencias, en Canelones, y que están haciendo un cable submarino para la fibra óptica. Este mes la empresa tecnológica hizo un llamado de personal técnico y jerárquico para trabajar desde el país: “Todas las señales indican que el proyecto sigue en marcha”, indicó Verri.

Por otra parte, fuentes del gobierno remarcaron a la diaria que el uso del agua que habría por parte del data center se destinaría a enfriar los equipos y luego se reutilizaría.

El proyecto generó controversias porque en 2020, al presentar la viabilidad ambiental ante el Ministerio de Ambiente, se definió que la información vinculada a los “detalles del agua”, “detalles de aguas residuales” y “detalles de la energía” serían tratados como “confidenciales”, por entender que constituyen “secreto industrial y comercial del titular del proyecto”.

El investigador de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República Daniel Pena hizo un pedido de acceso a la información al ministerio para conocer esas cifras, que fue denegado, por lo que el tema se laudó a nivel judicial. Finalmente, este año, el Tribunal de Apelaciones de 7º turno confirmó lo que había determinado la Justicia en primera instancia, y obligó a que el ministerio difunda la información.