Durante cerca de cinco horas, la Comisión Permanente del Parlamento recibió este martes al titular del Ministerio de Relaciones Exteriores, Omar Paganini, por la situación de la delegación uruguaya en la Comisión Técnica Mixta (CTM) de Salto Grande, en particular, por las designaciones directas en ese organismo, un tema que la oposición tiene entre ceja y ceja desde hace meses y por el que el oficialismo debió comparecer más de una vez al Palacio Legislativo. En esta oportunidad, las explicaciones del gobierno tampoco dejaron satisfecho al Frente Amplio (FA).

Antes que nada, Paganini subrayó que en estos últimos días hubo “algunos comentarios erróneos”, en referencia a lo señalado por el precandidato del FA Yamandú Orsi sobre la última resolución del Poder Ejecutivo, que dispuso la transferencia de 744 millones de pesos a la CTM. Al respecto, el ministro dijo que es importante que se tenga presente “que esa es la partida presupuestal aprobada por el Parlamento y que está congelada desde 2015”. Como ejemplo, mostró una resolución del 3 de junio de 2019, firmada por el entonces presidente, Tabaré Vázquez, y el ministro de Economía de ese momento, Danilo Astori, “con exactamente el mismo contenido de la resolución del Poder Ejecutivo actual”.

Luego, Paganini repasó los mecanismos de uso habitual para el ingreso de personal permanente en el organismo binacional. “Todas las incorporaciones de personal se deben dar con la aprobación de la CTM de Salto Grande, es decir, con la anuencia de la delegación uruguaya y de la argentina. Para tal aprobación, se debe contar con la unanimidad de los votos de los delegados presentes”, destacó. Agregó que, “vistas las directivas del gobierno uruguayo adoptadas este año en cuanto a las designaciones directas, se ha modificado el estatuto del personal y ya no se contempla la posibilidad del ingreso por designación directa”.

Atendiendo a la consulta sobre las designaciones directas de la actual CTM de Salto Grande, el ministro dijo que desde el 4 de octubre, “cuando la delegación argentina fue informada de la necesidad de revisar las contrataciones, se comenzó a trabajar desde la delegación uruguaya para encontrar caminos de solución a estos casos”.

Así las cosas, Paganini sostuvo que hasta el momento “se han resuelto 23 situaciones del total de 35 designaciones directas, ya sea de común acuerdo o ajustadas a la normativa vigente”. “Tengamos presente que cada uno de los trabajadores designados en la CTM, tanto argentinos como uruguayos, son empleados de un organismo internacional, con la vigencia plena de esos derechos, independientemente del área donde revisten funciones”, subrayó.

Al desglosar las “23 soluciones alcanzadas”, señaló que “hay siete que ya no son funcionarios, porque renunciaron en forma definitiva [cuatro] o se les vencieron los contratos y los mismos no fueron renovados [tres]”. “Hay una persona que cesará por jubilación el próximo marzo de 2025 y hay 15 personas que renunciaron por voluntad propia a su condición de funcionarios permanentes y pasaron a una modalidad de contratos anuales renovables, que fueron firmados en noviembre y cuentan con una cláusula que establece que la CTM, en cualquier momento y de manera unilateral, puede terminar el vínculo contractual por sola voluntad, y por otra parte siempre tiene la opción de no renovarlos”, sostuvo.

Entonces, Paganini dijo que “hay 12 situaciones no resueltas hasta el momento”, que son de personal permanente, y aun cuando en algún caso se presentó una renuncia voluntaria, “la delegación argentina no la aprobó, porque cumplen funciones en un área común del complejo binacional y la delegación argentina entiende que son necesarios allí”.

FA: la situación en la CTM es “formalizar la corrupción”

Finalizada la sesión, el FA brindó una conferencia de prensa, encabezada por el diputado Nicolás Viera, quien llevó la voz cantante de las críticas de la oposición a las designaciones directas en Salto Grande. El diputado subrayó que el Poder Ejecutivo no dio lugar a las diferentes resoluciones que la Cámara de Diputados tomó y que el presidente Luis Lacalle Pou “se comprometió a realizar”.

A principios de octubre, en la cámara baja, con los votos de todos los partidos, se aprobó una moción en la que se solicitó el cese de “forma inmediata” de las designaciones directas en Salto Grande. Este martes, Viera sostuvo que “lamentablemente” no encontraron avances desde esa fecha hasta hoy y que las soluciones que para el gobierno “son totales”, para la oposición “no lo son”. Porque, más allá del cambio de contrato que han tenido algunos funcionarios de la CTM, “lo cierto es que este Poder Ejecutivo es responsable de haber ingresado a dedo a 35 punteros políticos, particularmente del Partido Nacional [PN] y del sector Aire Fresco”, dijo.

“Una vez que este gobierno se vaya de la gestión de Salto Grande, le van a quedar de herencia a la gestión que venga 12 funcionarios con altos salarios y con una cantidad de beneficios que están muy lejos del común de los trabajadores que se rigen por el derecho uruguayo. Por tanto, allí vemos que el aparato político que el PN generó en Salto Grande está siendo financiado por el bolsillo de todos los uruguayos y uruguayas. Y por esa razón nosotros seguimos denunciando esta situación, porque evidencia una muy mala gestión y un mal gasto a la hora de la toma de decisiones”, subrayó Viera.

El diputado sostuvo que el argumento del gobierno, que básicamente es “decir que como la CTM se rige por derecho internacional, no puede cumplirse con el derecho uruguayo”, en realidad “no es cierto en su totalidad”, porque “cuando el gobierno uruguayo dio lineamientos estratégicos a la delegación de Uruguay en Salto Grande, estos lineamientos se cumplieron”.

Viera dijo que, como bancada del FA, siguen evaluando la situación y no van a parar “hasta tratar de lograr el máximo posible en cuanto al cumplimento de lo que resolvió la Cámara de Diputados”. Además, aseguró que si se aplicara el derecho nacional en algunas de las decisiones que tomó la delegación de Uruguay en la CTM, “más de uno estaría formalizado”. Puso como ejemplo a un delegado político de Uruguay en la CTM que “levantó la mano para votar beneficios personales, como el pago de viáticos”. “Después renunció a cobrarlos, pero los votó, y eso en el derecho uruguayo no se puede hacer. ¿Cuántas veces en este Parlamento discutimos porque hay legisladores que no aclaran que se ven beneficiados por lo que votan y lo votan? Para nosotros es un claro abuso de poder, que no corresponde”, lanzó.

Por último, Viera dijo que la situación en la CTM implica “formalizar la corrupción”, y de eso no solamente es responsable el expresidente del organismo, Carlos Albisu, que renunció a su cargo en setiembre, sino también “los directores que permanecen” en la CTM “y el Poder Ejecutivo, porque la gran mayoría de los punteros políticos pertenecen al sector del PN que lideran Álvaro Delgado y el presidente de la República”.