La sesión de este martes de la Comisión de Constitución y Legislación del Senado fue de esas en las que, al terminar, sus participantes recomiendan leer la versión taquigráfica, porque el intercambio estuvo caldeado. El tema que encendió la llama fue el proyecto de ley del senador colorado Adrián Peña para transparentar el ingreso de funcionarios a las intendencias.
La iniciativa fue aprobada en la comisión con los votos del Partido Colorado (PC), Cabildo Abierto (CA) y el Frente Amplio (FA), mientras que el Partido Nacional (PN) no lo apoyó. Ahora, el proyecto pasará al Plenario del Senado, donde, al igual que en comisión, precisa mayoría especial para ser aprobada, de dos tercios.
Lo aprobado es una nueva redacción del proyecto, de artículo único, que establece que “los ingresos y ascensos de personal a los gobiernos departamentales deberán realizarse a través de concursos públicos celebrados conforme a los principios de publicidad, transparencia, igualdad de oportunidades y a la justa ponderación entre la capacidad técnica y los méritos y antecedentes de cada persona”. “En su defecto, los ingresos de personal podrán realizarse a través de sorteos públicos convocados y celebrados por los gobiernos departamentales de acuerdo a los principios de publicidad, transparencia e igualdad de oportunidades”, se agrega.
La senadora blanca Graciela Bianchi dijo a la diaria que la sesión de la comisión estuvo “bastante picada” por “el estilo”, que ella dijo desconocer “dentro de la coalición”, porque consideró que lo ocurrido fue un “atropello”. Dijo que en realidad tenían previsto “conversar sobre el documento” que les entregó el Congreso de Intendentes, “que es un mamotreto que tiene como 600 páginas”, y designar dos constitucionalistas para que den su opinión, pero el FA, CA y el PC “habían acordado fuera de sala, no lo hablaron en coordinación”.
“Yo en realidad voté en contra del estilo, porque voy a analizar el tema”, aclaró Bianchi, y dijo que se trató de “una falta total de cortesía parlamentaria”. Asimismo, subrayó que no tiene problema en votar el texto que se aprobó, porque “es decir que la Constitución está vigente”, pero no lo votó porque era “convalidar el atropello”.
La discusión es “entre transparencia y opacidad”
Por su parte, el senador Peña dijo a la diaria que en diciembre habían acordado que el proyecto se votaba en la segunda sesión de marzo, y que hasta esa fecha tenía plazo el Congreso de Intendentes “para presentar la información”. “Lo hicieron la semana pasada, lo leímos, y para mí no arroja ninguna novedad ni ningún cambio. Entonces, habíamos dicho que se votaba”, subrayó. Agregó que los intendentes manifestaron que el proyecto “es inconstitucional, pero no presentaron ningún informe de ningún constitucionalista”.
“En realidad, estábamos en condiciones de votar en diciembre, y cuando fuimos a votar, el Congreso de Intendentes pidió ser recibido, que no lo había hecho en meses. Los recibimos y pidieron tiempo para presentar la información. Entonces, ya ahí dimos un nuevo plazo”, destacó.
Peña dijo que, en principio, el proyecto se trataría en el Plenario del Senado el 2 de abril, que es la primera sesión de ese mes, y para tener los dos tercios necesarios se precisa al menos un voto del PN. Señaló que conversará con alguno de los senadores blancos para ver si puede apoyar la iniciativa, “pero en definitiva está todo muy claro, es un artículo muy simple, y hay que ver si [los blancos] están para votar ese día”. “Va a pasar al pleno y ahí vamos a ver de qué lado está cada uno: es entre transparencia y opacidad”, finalizó.