Este miércoles se conoció que los responsables de Conexión Ganadera admitieron ante 100 inversionistas que el fondo presenta un balance negativo de 250 millones de dólares.

“Recién se dio a conocer el pasivo de Conexión Ganadera. Un pasivo de 400 millones de dólares que a cualquiera le puede dar un escalofrío”, expresó el senador del Partido Nacional Sebastián da Silva, consultado por Informativo Sarandí al respecto de los escándalos de fondos de inversión en el sector ganadero.

El senador reconoció “quedar sin palabras” y recordó que, durante todos estos años, “siempre” ha dirigido hacia Conexión Ganadera a las personas que le manifestaban tener dinero para invertir, “porque los otros no me generaban ningún tipo de respeto”, indicó.

Para Da Silva, “la obligación es poner un norte claro” en cuanto a que “son negocios de ente privado”, subrayó. “Esto quiere decir que el Estado, el gobierno, cualquier organismo gubernamental, no tiene ningún tipo de responsabilidad”, dijo el senador, que considera que “no por negocios entre privados que resultan mal tiene que haber una sobrerregulación en el sector ganadero”.

El nacionalista afirmó que “cualquiera que tenga un poco de idea y que corra atrás de los novillos”, como es su caso, agregó, sabe que “esas tasas de interés eran, por lo pronto, atractivas de más, porque si no, el resto de la ganadería seríamos todos giles”. Conexión Ganadera aseguraba a sus socios rentas fijas anuales de entre 7% y 9%, según el plan que se adquiriera. A su vez, remarcó su oposición de que “porque estos negocios hayan resultado de esta forma” se sobrerregulen los contratos entre productores y las actividades entre los privados.

Consultado sobre la falta de controles en el sector ganadero, Da Silva mencionó que tampoco tuvo conocimiento de la existencia de “un representante de los inversores, que mire un poco a ver qué es lo que se estaba haciendo”, y agregó que “el Banco Central advirtió hace unos años, empezó a advertir”, pero “es algo que está por fuera de lo que es la Superintendencia de servicios financieros” del Banco Central del Uruguay.

Por último, Da Silva pronosticó “que el negocio ‘portafolio ganadero de inversión’ son términos que van a desaparecer de la faz del territorio uruguayo”, porque “ninguno le va a poner un solo peso”.