“Un proyecto hecho a medida, con nombres y apellidos. De los mismos de siempre para los mismos de siempre”, expresó el edil colorado Federico Paganini, en rechazo a los proyectos presentados por el senador de su partido Pedro Bordaberry y el diputado nacionalista Rodrigo Goñi, que proponen otorgar prisión domiciliaria a los represores condenados por crímenes de lesa humanidad cometidos en la dictadura cívico-militar.

Paganini pertenece a la agrupación Unión de Jóvenes Reformistas del Partido Colorado (PC) y representa al sector Unir para Crecer, del senador Andrés Ojeda, en la Junta Departamental de Montevideo. La expresión del edil acompañó una publicación de su correligionario y diputado suplente Diego Riveiro, quien en un extenso posteo en rechazo a las iniciativas afirmó que hay proyectos de ley que “no se explican por sus fundamentos, sino por sus destinatarios”.

“Lo primero que debe decirse con claridad es que la prisión domiciliaria ya existe en el derecho uruguayo. La normativa prevé la posibilidad de la prisión domiciliaria cuando razones de salud u otras circunstancias lo justifiquen, siempre mediante acreditación y resolución fundada del juez”, sostuvo Riveiro, y apuntó que el sistema actual “ya permite respuestas humanitarias, pero las subordina –correctamente– a una evaluación individualizada del caso concreto”.

En ese sentido, Riveiro indicó que la intención del proyecto es “eliminar la valoración judicial y sustituirla por un automatismo legal”, lo que “constituye el primer problema grave”. “El texto obliga al juez a conceder la prisión domiciliaria una vez verificados determinados requisitos objetivos –edad y antigüedad del hecho– sin ponderar la gravedad del delito, el daño causado, los riesgos procesales ni la situación de las víctimas”, apuntó.

El colorado menciona que si bien el proyecto está formulado en términos generales, “su destinatario real es evidente”, en el sentido de que “la combinación de hechos ocurridos hace más de 30 años y persona de edad avanzada coincide casi exclusivamente con quienes están siendo juzgados o condenados por crímenes de lesa humanidad cometidos durante el último golpe de Estado en nuestro país”.

“Las leyes no deben redactarse con destinatarios implícitos ni con resultados predeterminados. Cuando eso ocurre, dejan de ser expresión de principios y se convierten en instrumentos de excepción, beneficiando corporativismos y afectando al propio sistema. Y cuando el Estado relativiza y automatiza su respuesta frente a los crímenes más graves, no gana humanidad: pierde autoridad moral”, concluyó.

Al presentar el proyecto, Bordaberry planteó que el objetivo es “cerrar en forma institucional las heridas aún abiertas”. En ese sentido, Riveiro dijo a la diaria que si “realmente” la intención es “sanar heridas” y “ser honestos con respecto a esta discusión pública”, y en el entendido de que “hay gente que quiere que quienes están [presos] en Domingo Arena estén en la casa”, considera que es necesario “dar el debate honestamente” y “decir: ‘mirá, yo quiero que esta gente esté afuera”.

El colorado destacó la importancia de que las voces jóvenes “encuentren canal de altavoz” en este tema y que se dé el debate. “Me parece que ese es el valor que tiene todo esto, porque, en definitiva, yo soy un joven de 29 años que no va a cambiar esa situación, pero por lo menos para dar el debate y que se sepa también que hay gente que no está de acuerdo con eso y que es válido también”, expresó.

En la misma línea, Paganini, quien consideró los proyectos como un “peligro” y una “aberración”, destacó en diálogo con la diaria que el debate sobre la prisión domiciliaria se “va a tener que dar” dentro del PC. Mencionó que “ninguno de los otros senadores [colorados] tiene una postura definida” con base en las conversaciones mantenidas en su partido, y agregó que “los procesos los va a tener que canalizar el partido”.

“Nosotros como agrupación, que tenemos un diputado suplente [Riveiro], y yo que soy edil fijamos una posición bien clara al respecto, y no es una posición negociable, de hecho es totalmente innegociable. No nos vamos a sentir representados por nadie que vote este proyecto”, aseveró.