En el despacho del diputado colorado Walter Cervini sólo hay un mapa de Canelones y una foto de Adrián Peña. Su amigo, fallecido hace ya un año en un accidente de tránsito, fue uno de los principales promotores del uso del lema común de la Coalición Republicana en Canelones para poder disputar la hegemonía de dos décadas del Frente Amplio (FA) en el departamento. Cervini, que compartirá el lema junto con los nacionalistas Alfonso Lereté y Sebastián Andújar, advierte que hasta ahora “no hay una encuesta que esté marcando una victoria absoluta del FA” y sostiene que existe “una oportunidad real para que el gobierno de Canelones cambie de signo político”.
¿Cuáles son los principales problemas de Canelones?
Hay una cantidad de cosas que pueden estar bien encaminadas y encaradas. Por ejemplo, nosotros identificamos que, en gestión ambiental, el contenedor domiciliario fue un acierto para Canelones. Hay más de 150.000 contenedores y ya se están entregando dos contenedores por hogar; eso para mí fue un acierto, funciona bien. Pero, por el otro lado, luego de 20 años de esta gestión no hemos podido solucionar los basurales endémicos, que siguen estando y son un problema. También hay un déficit importante en el arreglo de caminería rural y de calles que hoy no se ha solucionado; apenas se hace un bacheo en determinadas zonas. La intendencia tuvo la oportunidad de poder mejorar eso a través del ingreso de recursos por determinadas formas, pero los vecinos lo siguen padeciendo. En la ciudad de Las Piedras, por ejemplo, se gastaron 2,5 millones de dólares en arreglar la plaza y hacés dos cuadras y te caés en un pozo. Hablando de turismo, sólo 3% del turismo internacional queda en Canelones. Tenemos más de 60 kilómetros de costa, unas costas preciosas, con pasajes naturales, y desde la intendencia no se ha hecho una inversión en infraestructura para crecer. En Canelones no hay un hotel cinco estrellas, por ejemplo. No se ha pensado en recibir inversiones a nivel internacional que nos puedan poner a competir contra nuestros vecinos, Maldonado y Montevideo, que son los que reciben el turismo internacional.
¿Qué evaluación hacés del transporte en el departamento?
Creo que no se ha podido solucionar el problema del transporte y la movilidad en Canelones. Hoy la gente sigue demorando lo mismo para ir a trabajar y tenemos casos de canarios que demoran dos horas para ir a laburar. El trabajador está lejos de viajar más barato y de llegar más rápido, esa es la realidad. Hay que pensar mucho y analizar las propuestas que están en el Ministerio [de Transporte], como el tren-tram, que une El Pinar con la plaza Independencia, otro eje sería 8 de Octubre y otro eje grande es la vía del Ferrocarril Central.
¿El transporte de pasajeros por el Ferrocarril Central es viable?
Sí, es viable y es el justificativo de por qué se hizo la obra por el medio de las ciudades, con una cantidad inmensa de expropiaciones y con el daño que ha generado. Yo vivo en 18 de Mayo, a nosotros nos partió al medio la ciudad, muchos comercios cerraron, la obra fue muy dramática. La única manera por la que se puede justificar esa obra por el medio de las ciudades es que logremos mejorarle al trabajador el tiempo en el que va a trabajar. No hay otra explicación, porque nada puede justificar que la vía del tren pasara por el lugar donde pasó.
Has propuesto hacer una revisión tributaria a favor de los pequeños comerciantes. ¿Por qué?
Mi historia viene de ahí. Yo soy un carnicero, un emprendedor. Comencé muy joven, yendo caminando desde mi casa hasta donde pude poner el local de la carnicería, después pasé a una bicicleta, a una moto y después pude tener el auto propio. Pero la verdad es que el emprendedor es un valiente, porque es muy difícil emprender desde cero. Te voy a dar un ejemplo bien gráfico: vos te quedaste sin laburo, te pagaron la liquidación, tenés 30.000 pesos y querés poner un quiosco, entonces, o comprás 30.000 pesos de mercadería, o usás los 30.000 pesos para estar en regla con la intendencia y no tenés mercadería. Yo al cuerpo inspectivo canario lo pasaría a “CAC”, Cuerpo de Asesoramiento Canario, y haría un asesoramiento y un seguimiento, porque no todos los casos pueden ser iguales y no podemos medir al pequeño comerciante con las grandes industrias. La gente quiere estar en regla, pero si es tu supervivencia o estar en regla, siempre va a ser la supervivencia.
¿Qué impuesto específico se podría revisar?
Tenés tasa de habilitación comercial, tasa de habilitación bromatológica, carné de manipulación de alimentos, incluso hasta análisis de potabilidad de agua. Son trámites que parecen sencillos y que no mueven la aguja, pero cuando estás arrancando en un comercio es imposible que los hagas. La vara que pusieron en Canelones no es justa con el pequeño trabajador. Si no hay un acompañamiento de la intendencia, al pequeño emprendedor se le hace imposible.
Pero en tu caso por lo menos no fue imposible. A pesar de todo, hay gente a la que le va bien.
Sí... A ver, emprender es un esfuerzo muy grande. Y, como en todas las cosas, el factor suerte te tiene que acompañar. Yo me esforcé mucho, relegando cualquier otro tipo de iniciativa. Nos privamos de muchas cosas para poder cumplir, y creo que ese sacrificio extremo no es el que debe pasar un emprendedor. No es imposible hacerlo, pero sí es muy injusto.
¿Cómo se podría compensar la pérdida de recaudación por esa revisión tributaria?
Estamos estudiando el presupuesto. Hay una cantidad de gastos que se hacen que están desmedidos. Hay un exceso de cargos de confianza, hay una cantidad de cargos y de puestos que nos parecen excesivos. Por eso también nosotros presentamos el 15 de febrero el proyecto de ley del ingreso de los funcionarios públicos a las intendencias, el mismo proyectó que presentó Adrián Peña. En nuestra intendencia el ingreso va a ser por concurso o sorteo.
¿Hay clientelismo político en la intendencia? El candidato de la Coalición Republicana Alfonso Lereté ha dicho que 500 personas ingresaron por contrato directo.
Es una práctica que lamentablemente se da en todos lados. A nivel de funcionarios departamentales, cuando uno revisa y ve las contrataciones que se dan, 56% fue por designación directa, entonces, está lejos de ser una excepción y está más cerca de ser una práctica. Acá no hay que tildar de nada a nadie. Lo he dicho en más de una oportunidad: yo no quiero perder un minuto hablando del FA, yo quiero pelearme con los problemas de la gente. Tenemos que dar un salto de calidad, eso va a mejorar la función pública.
Con el diario del lunes, ¿qué reflexión hacés de lo que fue el intento de promover un plebiscito por el ingreso por concurso?
Fue luego de que pasó lo de Adrián y creíamos que era una oportunidad importante para homenajearlo antes de que terminara el período legislativo; por eso intentamos que se llegaran a las firmas de los legisladores de la Asamblea General. En esa ocasión el FA no firmó, pero no quiero etiquetar ni encasillar a un solo partido, porque el Partido Nacional no votó en otra oportunidad. Creo que ese período hay que tomarlo como terminado y rescatar las opiniones favorables de muchos representantes de distintos partidos que dicen que este proyecto tiene que salir.
¿Cómo fue el posterior pasaje de Ciudadanos a Vamos Uruguay? ¿Qué tiene Pedro Bordaberry que no tiene Robert Silva?
Llegar con Robert hasta la interna fue un compromiso que habíamos asumido como grupo, liderado por Adrián, que decidió no ser candidato. En una decisión grupal se decidió continuar apoyando la candidatura de Robert e hicimos todo lo posible por que ganara la interna. Trabajamos mucho, hicimos un gran esfuerzo, y cuando uno ve, la mayoría de los votos de Robert fueron producto de la votación que se obtuvo a través de referentes de Ciudadanos en todo el país. No se logró el objetivo de que Robert ganara la interna, pero sí quedó bien parado, fue el segundo. Ahora, en lo que refiere a la forma grupal, para nosotros era muy importante seguir defendiendo al compañero del interior, y creo que la mirada de Robert era más montevideana. Nosotros identificamos que teníamos que estar con nuestros referentes en todos los departamentos del interior y teníamos en Pedro una opción de un liderazgo fuerte. Creemos que no nos equivocamos en el camino; estamos contentos con el camino que tomamos.
¿Qué explicación tenés para la alta aprobación que marcan las encuestas sobre la gestión de la intendencia?
Hay un secreto que es clave: la comunicación. La intendencia montó un equipo de comunicación que ha logrado transmitir muchas veces lo que la intendencia pretende que la gente sienta. Ha sido muy invasiva la comunicación de la intendencia, con mucha presencia en todos lados. La gestión del intendente fue siempre resaltada e hizo que Orsi generara una muy buena imagen. Yo con Yamandú tengo excelente relación, pero sí critico muchas cosas de su gestión, porque para mí no es un buen gestor. Canelones debe solamente por motivo de fideicomisos más de 400 millones de dólares. Lo que gastó la intendencia en comunicación fue un factor fundamental para que se den esos números de aprobación. En 2019 pagó 15.200.000 pesos en sueldos de comunicaciones y en 2023 pagó 57.700.000 pesos, casi que se cuadriplicó el gasto. Yo pongo el ejemplo de que la división de comunicaciones de la intendencia tiene más funcionarios y cámaras que todos los cables de Canelones juntos. Y ese aparato de comunicación estuvo al servicio constante del intendente de Canelones, que nada más y nada menos terminó siendo el presidente de la República.
¿Pero ese gasto en comunicación no es mínimo dentro del presupuesto de la intendencia?
No sé si es mínimo, son 57.700.000 pesos. Además, estoy hablando solamente de pagos de sueldos a funcionarios; a mí me gustaría saber cuánto es el gasto en comunicación con las publicidades, con las contrataciones externas… Ese dato no lo tenemos. Entonces, yo no sé si es poco o si me da para poner cámaras de videovigilancia en un barrio y hacer una prueba piloto de robo cero, por ejemplo. Capaz que hay que administrar mejor, porque cada pesito cuenta.
La Coalición Republicana no va a tener un programa común en Canelones. ¿Estás cómodo con eso?
Estoy muy cómodo porque lo planteamos así, que cada uno refleje sus ideas y su impronta de trabajo, porque por algo somos tres candidatos con perfiles distintos. Creo que el FA se genera una desventaja presentando un solo candidato [en referencia a Francisco Legnani], y aparte sin el nivel de conocimiento que tenía Orsi en la elección anterior. No en vano Orsi tenía 65% de intención de voto antes de arrancar una campaña, y Legnani en estos momentos está llegando con 47%, según las encuestas divulgadas. Eso genera una oportunidad. Hoy no hay una encuesta que esté marcando una victoria absoluta del FA, cuando en la elección anterior discutíamos si el FA llegaba o no a la mayoría especial de 21 ediles. Hoy hay una oportunidad real para que el gobierno de Canelones cambie de signo político.
¿El diputado de Cabildo Abierto [CA] Álvaro Perrone les avisó que no va a participar en la campaña?
Bueno, sí, hemos hablado con el diputado Perrone, con el cual nos conocemos hace muchísimos años, y creo que él no se siente con la fuerza para desarrollar una campaña departamental. Es indudable que CA ha salido golpeado de las elecciones. Pero el caso del diputado Perrone es personal, porque CA está trabajando y está trabajando mucho en Canelones.