El directorio de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) intervino el hospital de Artigas el lunes 22, en respuesta al “proceso de fortalecimiento de la gestión administrativa y asistencial”, tal como expresó el organismo en un comunicado el día que nombró a la médica Mildred de Lima para conducir el hospital durante 30 días, en principio sin el desplazamiento de las autoridades actuales. Los problemas más visibles tienen que ver con el atraso en estudios de anatomía patológica y las listas de espera para acceder a oftalmólogos y psiquiatras.

El jueves 25, el Sindicato Médico de Artigas (afiliado a la Federación Médica del Interior) emitió un comunicado en rechazo a la intervención del hospital. Expresa que los problemas asistenciales ocurren “desde hace mucho tiempo” y los atribuyen a dos situaciones: “la falta o lentitud en las respuestas a las soluciones de recursos o gestiones para el hospital de Artigas, a nivel de ASSE central”, y “el continuo hostigamiento y los bloqueos a proyectos de mejorar servicios y prestaciones (por ejemplo Psiquiatría) por parte de la Comisión Interna de la Federación de Funcionarios de Salud Pública”. En diálogo con la diaria, Luis Gonçalves, secretario del sindicato, expresó que la sala de psiquiatría que se había inaugurado nunca se puso en marcha por la incidencia de los funcionarios no médicos, y el psiquiatra terminó renunciando.

El gremio reprocha que la dirección de la Región Norte de ASSE bloqueó los planteos del equipo de gestión del hospital y que derivó procedimientos asistenciales hacia otros departamentos, como la realización de estudios de anatomía patológica. Expresó que esa carencia fue reclamada por todas las direcciones desde 2011, cuando “se perdió el servicio con que contaba el hospital, por falta de apoyo central que permitiera la radicación definitiva del médico patólogo”, y lamentó la muerte de un paciente que esperaba el resultado de su anatomía patológica.

“Las direcciones anteriores y el equipo de gestión actual no pueden ser tomados como chivo expiatorio de una responsabilidad que es de los niveles superiores de decisión”, advierten los médicos, quienes aclararon que no participarán “en luchas internas de poder en ASSE. Además, declararon “persona no grata” a Liria Figueiras, integrante de la Región Norte, y reprobaron la actuación de Pablo Cabrera, director de ASSE en representación de los trabajadores, por anunciar a la prensa que el equipo de gestión del hospital sería desplazado.