Después de estar más de dos meses fuera del Directorio de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), los representantes de los trabajadores y de los usuarios de ASSE volverán a ocupar los cargos que ocupaban desde junio de 2016. Sus cargos habían caído a fines de febrero, cuando el Poder Ejecutivo renovó la mayoría del directorio de ASSE; eso obligó al Ejecutivo a volver a pedirle la venia al Senado, pero como no se llegaba a los dos tercios de votos, se debió esperar 60 días. Finalmente, el Senado votó ayer, por mayoría, las venias a los directores sociales de ASSE: Natalia Pereyra por los usuarios, y Pablo Cabrera por los trabajadores.

Los partidos Independiente y Colorado votaron en contra, así como el sector Todos del Partido Nacional. El senador independiente, Pablo Mieres, dijo que los representantes sociales representan intereses corporativos y que no deberían tener voto; cuestionó, además, duramente la representatividad de Pereyra porque, a falta de mecanismos de elección, fue votada apenas por 38 delegados de usuarios. Además de eso, tanto el colorado Pedro Bordaberry como el nacionalista Luis Alberto Heber reclamaron la participación de la oposición en el directorio y recordaron las irregularidades de ASSE que están siendo estudiadas por la comisión investigadora parlamentaria y en la Justicia.

La venia de Cabrera fue votada por 19 senadores: los 16 del Frente Amplio (FA) y tres de Alianza Nacional (Partido Nacional). Pereyra sólo recibió el apoyo de los 16 del FA.