El rotavirus causa cuadros de diarrea persistente, vómitos y otros síntomas que generan deshidratación, sobre todo en los niños más pequeños. Durante el último tiempo los centros de salud han registrado cada vez más casos, según dijo en diálogo con la diaria Mónica Pujadas, pediatra y expresidenta de la Sociedad Uruguaya de Pediatría.

Por otra parte, explicó que no se puede definir un aumento de casos porque la notificación del rotavirus no es obligatoria para los centros de salud; sin embargo, sí es notoria una mayor cantidad de casos durante el período pospandemia, agregó.

Según Pujadas, es una afección que predomina en niños, ya que el 90% de los menores de dos años han cursado al menos una vez la infección. Se trata de un virus “muy contagioso” que tiene la capacidad de permanecer mucho tiempo en el ambiente, por lo tanto, es fácil adquirirlo.

A su vez, la deshidratación puede causar fallas en los riñones, convulsiones, shock y en algunos casos, “aunque son pocos”, puede llegar a generar una infección mortal. De todas maneras, Pujadas dijo que en general si se consulta oportunamente y se repone el líquido perdido con suero oral o por vena, se revierte la deshidratación.

Para prevenir el virus, la pediatra recomendó sobre todo un lavado de manos frecuente, control “y manipulación prolija en el cambio de pañales de los bebés”, ya que el virus se contagia de persona a persona, a través de manos u objetos contaminados con secreciones o materia fecal donde pueda estar el virus.

En cuanto a las causas del mayor registro de casos, agregó que está dentro de los fenómenos que ocurren con bacterias y otros virus respiratorios, que durante los últimos años tienen mayor presencia, aunque antes de la pandemia ya era el virus digestivo más frecuente en el mundo.