Hace poco más de un año, durante los primeros meses de intervención del Casmu, un grupo de más de 50 médicos realizó una denuncia penal contra Rodrigo Perna, vicepresidente del Sindicato Médico del Uruguay (SMU), por difundir la identidad y el sueldo de algunos funcionarios, además de médicos, abogados y contadores.

Los denunciantes justificaron la implicancia de la Justicia en que se trataba de hechos que “dañan al Casmu”, y especificaron que el 20 de julio de 2024 se difundieron por WhatsApp, en diversos grupos, salarios de diferentes dependientes o asociados del Casmu.

La resolución de Fiscalía, a la que accedió la diaria, dice que Perna “aportó su celular y sus chats, donde surge claramente que el listado estaba circulando en varios grupos médicos de WhatsApp, que asimismo reenviaban en masa”, por lo que en los mensajes se identificó el aviso de “reenviado muchas veces”.

“La indagatoria preliminar no aporta elementos que acrediten lo denunciado y permitan imputación alguna”. Por no constatarse delito, la denuncia se archivó.