Deporte
Bien metida
La selección de Óscar Tabárez aplicó la táctica de visitante y resultó utilitaria. Después de sufrir durante buena parte del encuentro, Uruguay terminó ganando 2-1 a un Chile que dominó las estadísticas pero no pudo con el rubro que manda: los goles. Y fue mérito de la selección celeste, que defendió sin dejar espacios claros, presionó la salida de los trasandinos y contó con una zona final segura, como siempre, sumada al incansable trajinar de Egidio Arévalo Ríos.