Posturas
Entre la política de la intimidad y el socialismo democrático
Lacalle construye poder como sujeto personal que encarna un mandato cultural de ideales de individuo económico consumidor libre, en un mundo seguro, más ordenado de contención de la demanda social y con transparencia institucional. Los casos Marset y Astesiano situados en el corazón del poder pueden ser el choque del iceberg con el Titanic de la política de intimidad.