Nada ahorra más en salud que un proceso asistencial de excelencia, dicho de otra manera, la clave es entender que la forma en que más se gasta dinero en salud es cuando se brinda una mala asistencia.
El Sistema Nacional Integrado de Salud fue un gran logro de los gobiernos frenteamplistas que no ha podido ser anulado por este gobierno de derecha. De lo que se trata ahora es de que funcione y de mejorar su equidad y eficacia.
ASSE ha carecido de una estrategia coherente a largo plazo. Sus decisiones han sido principalmente reactivas, lo que ha afectado gravemente la calidad del servicio.
Estamos asistiendo a sociedades en las que la acción de escucha a los y las jóvenes es cada vez más acotada. Los niños, niñas y adolescentes tienen mucho para decir y hacer.
Este es el segundo de dos artículos orientados a abordar los desafíos que enfrenta el Sistema Nacional Integrado de Salud y proponer alternativas de cara a una reforma de segunda generación
Este es el primero de dos artículos orientados a abordar los desafíos que enfrenta el Sistema Nacional Integrado de Salud y proponer alternativas de cara a una reforma de segunda generación. En particular en este caso, el objetivo es caracterizar al sistema de salud uruguayo y examinar algunos puntos críticos que afectan directamente los costos, ingresos y la calidad de los procesos asistenciales
La gestión del gobierno multicolor y la situación del SNIS al terminar los gobiernos del FA evidenciaron un conjunto de debilidades, por lo que es necesario construir una segunda generación de reformas del sistema de salud.
La situación actual del Casmu no sólo pone de manifiesto los problemas internos de la mutualista, sino que también refleja las fallas estructurales del sistema de salud uruguayo.
Una materia pendiente es la completa incorporación de la atención integral de los problemas de salud mental en el Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS). A esta altura ya es alarmante el rezago.