Ancap detuvo las maniobras regulares en la refinería de La Teja desde este lunes para llevar a cabo operaciones de mantenimiento en el marco de una parada técnica, tal y como había anunciado el presidente del ente, Alejandro Stipanicic, en agosto.
De acuerdo con información oficial de Ancap, bajo un régimen de trabajo de 24 horas, los siete días de la semana, la operación debería demorar 100 días, con un costo total de 200 millones de dólares. El monto se puede atribuir al proceso de mantenimiento, así como a la necesidad de importar combustibles refinados por parte del ente durante la parada técnica, dado que la planta de refinería es la única en el país.
La Federación Ancap (Fancap) se encuentra en conflicto por la intención del directorio de llevar adelante una asociación público-privada para la producción de cemento y pórtland. El sindicato mantiene un régimen de trabajo a reglamento, por lo que los trabajadores no cumplen con turnos extras y, según había acusado Stipanicic, esto desembocaría en un prolongamiento de las tareas del mantenimiento, la suspensión de actividades por 500 días y un sobrecosto operativo de 400 millones de dólares.
El presidente de Ancap había instado al sindicato a que “revea su posición” para que “se abra una instancia de diálogo”, “se levanten las medidas” y “se imponga la razón”. Natalia Belo, presidenta de Fancap, dijo a la diaria que la decisión de trabajar a reglamento se enmarca en un plan de acción definido por la asamblea general del sindicato, el 10 de mayo, que cuenta también con la aprobación de su Consejo Federal, y que no está en los planes un posible cambio en las medidas de lucha, al menos hasta el 14 de setiembre, día en que se reunirá la asamblea general.
Belo rechazó cualquier vínculo de la suba del precio de los combustibles con el accionar del sindicato. “No tiene por qué repercutir para nada el corte de horas extras en el precio de los combustibles”, acotó la presidenta de Fancap.
Belo exhortó a Ancap a postergar la fecha de cierre del pliego licitatorio para la asociación público-privada en la producción de cemento y pórtland, “en el entendido de lo que cuestan para la administración las medidas que estamos llevando adelante”.
Además, Belo detalló que existen un “montón de circunstancias externas” que también afectan a la parada técnica, y recordó que la refinería opera ininterrumpidamente desde 2017, “una de las corridas operativas más largas que ha tenido”. Esto podría afectar su nivel de deterioro, lo que podría necesitar un trabajo “de mayor envergadura”, explicó.
Por último, consultada sobre un supuesto “bono especial” que Stipancic declaró a M24 que se pretende ofrecer a Fancap “para terminar los trabajos en fecha”, Belo recordó que el diálogo que el sindicato mantiene con el directorio del ente “está muy limitado”, además de explicar que no han recibido ningún planteo de ese tipo hasta la fecha.