El laboratorio Brandt-Baliarda y el Sindicato de la Industria del Medicamento y Afines (SIMA) mantuvieron una nueva instancia de negociación el martes en la Dirección Nacional del Trabajo. El encuentro fue para dialogar sobre los seis trabajadores que la empresa resolvió despedir días atrás, luego de anunciar que cierra su planta de producción ubicada en Montevideo.
Zoya Franco, secretaria general del SIMA, expresó a la diaria este jueves que “en esta instancia la empresa argumentó que para ellos en la actualidad es más favorable producir los productos en Argentina. Les es más rentable traer a Uruguay los medicamentos ya terminados. Dijeron que es un tema pura y exclusivamente de rentabilidad. Es un tema de ganancias”. La empresa confirmó que, tras el cierre de la planta, en Montevideo quedaría una oficina, un depósito y el laboratorio de control.
Al respecto, recordó que entre los trabajadores hay a una funcionaria que cumple tareas en el área administrativa. “Como sindicato, lo que no entendemos es el caso de la trabajadora, que es la única compañera afiliada al SIMA, y además delegada sindical. Ella fue dirigente nacional. Hay una clara intención de borrar de la empresa la presencia del sindicato. Reclamamos su incorporación inmediata”, expresó.
El argumento que maneja la empresa “es bastante discriminatorio”, opinó. “Afirmaron que si el laboratorio la reincorpora a las tareas debe cerrar la oficina y depósito en la zona de Capurro, y que ese puesto es el más fácil para reemplazar”, esto porque, según la empresa, “tiene un nivel de formación inferior a los otros trabajadores del laboratorio. Ese fue el argumento que plantearon”.
Franco afirmó que el SIMA rechazó absolutamente la argumentación de la empresa e insiste en que la empresa “busque la forma de reincorporar inmediatamente a la trabajadora a sus labores”, esto pese a que la empresa anunció que “la decisión de reincorporarla o no, ante todo, debe ser elevada a Argentina, ya que la sede central está en ese país”.
La próxima instancia entre el laboratorio y el sindicato es el próximo lunes 27. Allí, la empresa, explicó la dirigente, debería presentar una respuesta con respecto al futuro de la trabajadora administrativa. “Si la empresa se niega nuevamente a reincorporarla, el sindicato tomará las medidas correspondientes. Apostamos a que recapaciten y no tengamos que llegar a otros ámbitos, entre ellos, los judiciales”, dijo.
Con relación al diálogo con la Asociación Nacional de Laboratorios, dijo que “estamos en contacto permanente con ellos”, y que “reiteramos la preocupación ante ellos por el accionar de estos laboratorios, que son integrantes de la propia asociación. Sabemos que la asociación está en conversaciones con las empresas. La cámara no se ha negado a interceder, y estamos dialogando. Si no nos entendemos con Brandt-Baliarda en el Ministerio de Trabajo, está prevista la posibilidad de incorporar a las negociaciones a la Asociación de Laboratorios”.
Con referencia a los cinco trabajadores restantes que fueron despedidos, manifestó que ninguno de ellos está sindicalizado y que “no buscaron ser asesorados por el sindicato. Desde la organización sindical, no hemos podido llegar hasta ellos. Por lo tanto, no tenemos mayores detalles de su situación. Sí sabemos que ya han acordado con la empresa las cifras correspondientes de cada despido”.