Luego de mantener varias reuniones, las últimas dos celebradas entre este lunes y martes, no hubo acuerdo entre la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL), la Cámara de la Industria Láctea del Uruguay (CILU), la empresa Claldy y ocho trabajadores de esa empresa que fueron despedidos en agosto. Por tal motivo, al menos dos trabajadores iniciarán este miércoles una huelga de hambre. En la reunión participó también el PIT-CNT, el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social y un representante del Ministerio de Industria, Energía y Minería.

La FTIL, tras finalizar la reunión, convocó a trabajadores y afiliados a asistir este miércoles a las 12.00 a la plaza Independencia, punto donde se instalará una carpa por parte de los ocho trabajadores despedidos. Dicha decisión se planifica y coordina en conjunto con el área de Derechos Humanos del Sindicato Médico del Uruguay (SMU), quien va a monitorear diariamente la salud de los trabajadores en huelga de hambre.

Enrique Méndez, dirigente de la FTIL, dijo a la diaria que, en la reunión de este martes, “se barajaron diferentes opciones y propuestas alternativas para buscar de forma paulatina la reincorporación de alguno de los trabajadores despedidos, pero la empresa Claldy aceptaba sólo si terminaba con el despido”. Acerca de la carpa a instalarse en el entorno de la Torre Ejecutiva, dijo que “es de la FTIL” y para respaldar “a los compañeros, tanto a los que harán la huelga de hambre como a los que no”.

En ese sentido, agregó que el resultado de la reunión “reafirma el planteo de la posición antisindical de la empresa, y así lo ratificó el PIT-CNT, y lo corroboró el propio Ministerio de Trabajo”. Consultado acerca de si en la posición de la empresa no tuvo injerencia la CILU, Méndez señaló que dicha gremial “buscó opciones para negociar”, pero Claldy “no respondió a la cámara que integra”.

En referencia al relacionamiento con la empresa, el dirigente reconoció que “ahora está más deteriorado que nunca”, y resaltó que los trabajadores y la FTIL “todavía están abiertos a la negociación”. Comentó también que, a futuro, “se asistirá a los ámbitos de diálogo que convoquen la presencia del gremio y los trabajadores. No descartamos las medidas de lucha que se puedan discutir y decidir de ahora en más”.

Marcela Barrios: “Ninguna de las alternativas dejó satisfechas a las dos partes”

Por su parte, la directora nacional de Trabajo, Marcela Barrios, consultada por la diaria acerca del balance de las negociaciones, contestó que “se ha estado negociando desde el momento en que la empresa decidió despedir a los 32 trabajadores. Fueron varias instancias, hasta la última, en la que quedaron ocho trabajadores”.

Agregó que, en los últimos días, “se estuvo negociando permanentemente”, e incluso, este lunes, la reunión entre las partes duró aproximadamente unas cinco horas. Sostuvo que “se buscaron distintas alternativas, pero ninguna dejó satisfechas a las dos partes”, y a la vez, destacó el rol y postura del PIT-CNT y la CILU, “quienes cooperaron y ayudaron a buscar soluciones”.