Entre las propuestas que se conocieron del Ejecutivo electo para el próximo gobierno se encuentra la posibilidad de establecer un IVA diferenciado para los sectores más pobres, lo que provocó que en redes sociales se especulara sobre el establecimiento de franjas progresivas en este impuesto. En este contexto, se viralizó el posteo de un usuario de X que señalaba que “en Uruguay se pagan impuestos de Finlandia con resultados de Centroamérica”.
Sin embargo, de acuerdo al monitor de indicadores del portal especializado en economía Expansión, la presión fiscal de Uruguay ascendió en 2021 a 26,5% del producto interno bruto, mientras que la de Finlandia fue de 43,5%. Con esto, el país nórdico se encuentra en sexto lugar entre los 38 países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con mayor carga impositiva, cuyo promedio fue 34,2%.
Si se compara con países de la región, Uruguay tiene menor presión fiscal que Argentina (29,1%) y Brasil (33,5%) y se encuentra por delante de Chile (23,9%), Bolivia (22,6%) y Paraguay (14%). Asimismo, el promedio de América Latina y el Caribe se encuentra en 21,5%. En la última década, la presión tributaria en Uruguay osciló entre el 26% y el 28,5%, este último alcanzado en 2018.
En cuanto a los impuestos a la renta, la tasa máxima en Uruguay corresponde a 36%, con un mínimo no imponible de 43.239 pesos. A partir de esa cifra se aplican franjas progresivas con alícuotas que comienzan en 10%. En Finlandia, en cambio, la tasa máxima alcanza el 44% y no existe ningún tipo de exoneración a los ingresos menores, por lo que los salarios mínimos tributan 12,5%, porcentaje que aumenta progresivamente. A esto debe adicionarse impuestos municipales aplicados al salario, con tasas que van del 5% al 20%.
Por otra parte, en Uruguay los impuestos sobre la renta de las actividades económicas (IRAE) significan 25% de la renta anual neta, mientras que su símil finlandés alcanza el 30% para las rentas menores a 30.000 euros y 34% para las ganancias superiores a esa cifra.
Finalmente, un impuesto al consumo como el impuesto al valor agregado (IVA) es levemente superior en Finlandia, donde el IVA general alcanza el 24%, con tasas diferenciadas de 10%, aplicado a productos farmacéuticos, libros y prensa, entre otros, y 14% para productos alimenticios.
En Uruguay el IVA general es de 22%, mientras que el IVA básico es de 10% para productos de primera necesidad y 0% para productos exportados y buena parte de los productos agropecuarios. De acuerdo a los datos de la Dirección General de Impositiva, los impuestos al consumo aportan más del 50% de los ingresos del organismo recaudador.