Menos de 5% del territorio en Uruguay está cubierto por montes nativos. La iniciativa Plantatón, desde 2019, busca revertir la situación plantando árboles autóctonos. Ya lograron ubicar más de 2.000 en Artigas, Colonia, Cerro Largo y Salto.
El jueves se habilitó un nuevo llamado para plantar 1.000 árboles en Punta del Diablo, departamento de Rocha, en setiembre. Quienes estén interesados en colaborar pueden comprar un árbol por 15 dólares; también se les dará una constancia de participación y se los mantendrá al tanto de los avances de la campaña. Las compras se harán a través de la plataforma de crowdfunding disponible en la página web de Plantatón. Organizaciones locales ayudarán en el cuidado y el monitoreo.
Plantatón fue impulsada con el objetivo de restaurar bosques nativos en áreas y cuencas clave, pero al mismo tiempo invita a sensibilizar a la población sobre su valor ambiental, cultural y social. Está integrada por la Red Uruguaya de ONG Ambientalistas, los ministerios de Ambiente y de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), junto con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo. “Por cada árbol aportado estarás contribuyendo a la restauración del bosque nativo costero de Uruguay, la conservación de nuestra biodiversidad y nuestra calidad del agua, enfrentando el cambio climático”, se señala en la plataforma de la campaña.
A lo largo de este año también están planificadas plantaciones en Punta Yeguas, Montevideo, y en Ciudad de la Costa, Canelones. La iniciativa busca aportar en el mismo sentido que los Objetivos de Desarrollo Sostenible promovidos por las Naciones Unidas. “Proteger, restablecer y promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, efectuar una ordenación sostenible de los bosques, luchar contra la desertificación, detener y revertir la degradación de las tierras y poner freno a la pérdida de diversidad biológica”, versa el objetivo 15.