Unidos

La UCRUS es la agrupación que nuclea a los clasificadores independientes y a los cooperativistas. Patricia Gutiérrez, secretaria general de UCRUS, detalló en diálogo con la diaria que en total hay 1.700 afiliados; aclaró que muchos clasificadores desconocen la existencia del gremio y que se enteran cuando surge algún inconveniente como la quita ilegal de caballos. Consultada sobre los beneficios de desarrollar la tarea de clasificación de residuos en forma cooperativa, mencionó que la labor tiene pros y contras. “Yo me adapto, soy sociable, me gusta estar con la gente, pero hay gente que no comparte trabajar con otros”, puntualizó Gutiérrez, quien integra la cooperativa Galponeros. Cumplir un horario, “llueva, truene o salga el sol”, es uno de los puntos que consideró negativos puesto que quienes trabajan a solas deciden cuándo salir o cuándo quedarse en sus casas sin que nadie los evalúe.

El principal temor de los clasificadores de residuos era que la Semana de Turismo transcurriera sin jueces ni funcionarios del Estado responsables de garantizar la seguridad a los trabajadores. “Desde hace un tiempo la Policía hace requisa de caballos. En Semana de Turismo no hay jueces ni nada y pensamos que harán uso y abuso de poder”, comenzó explicando a la diaria Walter Rodríguez, presidente de UCRUS.

Ante la inquietud manifestada, los trabajadores solicitaron una entrevista a Bonomi, quien los recibirá mañana a las 11.00 en el Ministerio del Interior (MI). La inmediata respuesta del ministro “cambió la realidad”. “Pensamos que íbamos a estar en la semana permanentemente expuestos”, comentó.

Planes para el encuentro

En primer lugar, los agremiados en UCRUS denunciarán la requisa de caballos que desde los últimos meses efectúan los funcionarios policiales. Se trata de quitas que no han sido certificadas, por lo que los clasificadores desconocen el paradero final de los carros y de los animales, y en la mayoría de los casos no los han podido recuperar. Rodríguez detalló que algunos clasificadores han hecho una recorrida exhaustiva por las comisarías más cercanas al lugar donde les fue quitado el caballo, pero en ninguna estaban enterados de la operación policial llevada adelante ni pudieron orientarlos en la búsqueda.

Otro asunto que tratarán en la reunión es su malestar respecto a las limitaciones que han encontrado para ingresar a algunas áreas. En más de una ocasión, funcionarios del MI no los han dejado recolectar residuos en algunas zonas de Pocitos o de la costa capitalina. Sobre este punto, el presidente de UCRUS especificó que el martes representantes del gremio se reunieron con el concejal Hugo Recalt, del Municipio CH, quien trabaja en la consolidación de un plan piloto de clasificación de residuos. “Recalt nos dejó en claro que es un proyecto, todavía no se aplica. Sin embargo, la Policía ya declaró zonas de exclusión”, apuntó.

El concejal destacó en conversación con la diaria lo productiva que fue la reunión y reparó en que todavía no hay áreas de acceso restringidas. “Nunca largamos ni anunciamos zonas de exclusión, ni siquiera sabemos cuándo vamos a empezar con el plan”, afirmó.

Si bien se manifestó conforme con la respuesta de los trabajadores, expresó: “Vemos que ellos están de acuerdo con las plantas de clasificación, el problema es que no sé si va a haber lugar para todos”.

El plan que está en elaboración propondrá desarrollar una “recolección selectiva” en más de 80 manzanas de una zona de la capital donde se concentra la mayor densidad de población. Los vecinos serán los primeros en la cadena de clasificación, puesto que tendrán que discriminar entre residuos húmedos y secos al momento de tirar la basura domiciliaria. Los porteros de los edificios ocuparán el segundo lugar en la cadena; su tarea consistirá en sacar las bolsas de residuos secos cuando pase el camión de la Intendencia de Montevideo a retirarlos, para posteriormente depositarlos en un centro de clasificación que funcionará en una zona relativamente cercana a donde habita gran parte de los trabajadores que viven de la basura. Una vez que la iniciativa comience a funcionar, los clasificadores no podrán ingresar al área donde se desarrolle la experiencia piloto. Su tarea tendrá lugar en el depósito final.

Otro punto que fue aclarado en la reunión mantenida entre el representante del Municipio CH y delegados de UCRUS es que la parte monetaria será manejada por los propios clasificadores; asimismo, quedó determinado que no dejarán trabajar a niños.

Consultado sobre cuándo comenzará a funcionar el programa de clasificación, Recalt expresó que el inicio depende de cuánto demore la construcción de una planta. “Si no tenemos la planta de clasificación no podemos concientizar a la gente”, puntualizó el vocero del municipio.