De acuerdo a lo informado por el CMU, el voto para este domingo es secreto y obligatorio, deben sufragar los médicos en actividad inscriptos en el registro del Ministerio de Salud Pública (MSP) y también pueden hacerlo los jubilados registrados en el CMU. Quienes concurran a sufragar deberán hacerlo con su cédula de identidad en el circuito dispuesto en el plan circuital, al que puede accederse en www.colegiomedico.org.uy.

Los profesionales que no concurran a votar deberán pagar una multa de cinco unidades reajustables en los siguientes 60 días a la realización del plebiscito. La elección estará regida por la Corte Electoral y los funcionarios designados para las mesas de votación recibirán los votos por las papeletas a favor y en contra de la propuesta, en el horario de 9.00 a 19.00.

El presidente del CMU, Jorge Torres, explicó a la diaria que el proceso de elaboración del código comenzó ni bien fueron elegidas las autoridades del colegio, sobre fines de 2011 (el colegio fue creado por ley en 2009 y reglamentado en 2010). En enero de 2012 se remitió un informe sobre el tema para que los distintos colectivos médicos lo discutieran, a partir de que el CMU recibió más de 300 comentarios. A partir de ahí, el consejo del colegio empezó a trabajar en la redacción de la propuesta que el domingo va a ser plebiscitada.

Nuevo escenario

El presidente del Sindicato Médico del Uruguay (SMU), Martín Rebella, dijo a este medio que el gremio ya cuenta con un código de ética desde hace más de 20 años, que también fue plebiscitado en su momento, y que pasa lo mismo en otras agremiaciones de la medicina. Sin embargo, consideró que la propuesta del CMU tomó como base la redacción de los códigos ya existentes pero actualiza varios aspectos y pasa a ser una referencia a nivel nacional porque ya no depende de las orientaciones de cada gremio. Consultado al respecto, Torres consideró que los aspectos más innovadores de la nueva propuesta son sus definiciones acerca del comienzo de la vida, la clonación, la operación con humanos y el fin de la vida, sobre el que consideró que solamente se discutía acerca de la eutanasia.

El presidente también subrayó que entre 20% y 25% del código está dedicado a la relación médico-paciente, en el marco de que en los últimos tiempos se ha visualizado el derecho a la salud como inherente a la personalidad humana. Puede accederse a la propuesta completa en www.colegiomedico.org.uy/node/1 .

Rebella sostuvo que una de las funciones principales del CMU es la regulación de los aspectos éticos de la profesión y subrayó que el código permite la posibilidad de la autorregulación. Torres explicó que, una vez aprobada, la norma será referencia tanto para los médicos como para el tribunal de ética del organismo, recientemente nombrado. Acerca del tribunal, agregó que puede haber aspectos de su actuación que “desborden” al código y que deban ser considerados en forma particular.

Seguir de cerca

Si bien expresó su postura favorable a la propuesta, Rebella consideró que hay algunos aspectos que no quedan del todo definidos y que deberán ser objeto de una reglamentación específica posterior a la aprobación del código, como el vínculo entre los médicos y las industrias farmacéuticas. Sobre este punto, aclaró que fue uno de los que generaron mayor debate por el conflicto de intereses que puede suponer y por la necesidad de mantener alejada la práctica médica del lucro.

En relación a este tema, el Consejo de la Facultad de Medicina en su sesión de ayer, si bien llamó a participar en la elección y consideró que la aprobación del código será un avance en la ética de los médicos y en su relación con la sociedad, también pidió que se incluyan normas “que den transparencia” a la relación entre los profesionales y las empresas dedicadas a la comercialización de medicamentos y tecnologías en el sector de la salud.

Consultado por estos ítems, Torres consideró que hay aspectos que son perfectibles y que con la ética médica sucede algo similar a lo que pasa con la de los pueblos en general, debido a que van surgiendo nuevas realidades que deben ser incorporadas a las normas éticas.

De acuerdo a la ley de creación del CMU, para que el proyecto sea aprobado necesita de la mayoría absoluta de los votantes y que éstos sean como mínimo 35% del padrón de habilitados. Una vez aprobado debe ser remitido ante el MSP, que lo enviará al Parlamento para su aprobación final.