De los cuatro equipos que el sábado saltaron al ruedo capitalino, sólo ganó Wanderers. En su casa acumuló mayores méritos que Racing hasta derrotarlo por un claro 3-0. Por fin, el equipo de Alfredo Arias honra las expectativas generadas por un plantel de calidad. Eso sí, la zona de clasificación a las copas internacionales sigue quedándole lejos. Distinta fue la historia en el Tróccoli, donde Cerro y Fénix empataron 1-1 pese a que los albivioletas empezaron ganando y jugaron más de medio partido con un futbolista más que los locatarios. Sin embargo, alcanzaron su noveno encuentro consecutivo sin victorias. Pese a que tienen bastante más aire que los más comprometidos, la seguidilla los obliga a atender la tabla del descenso. Cerro no tiene por qué temerles, pero tampoco se decide a apuntarles a las plazas coperas de la anual.

Senderos que se bifurcan

Tras el encuentro en el Parque Viera quedó bastante claro por qué Wanderers mira hacia arriba y Racing hacia abajo. Antes de cruzarse estaban muy cerca en la anual. Una victoria cervecera hubiera dejado un punto por encima a los de Giordano. Pero los bohemios cocinaron a fuego lento y, tras un primer tiempo más bien parejo, la extensión y la técnica de su plantel hicieron la diferencia. También hubo algo de oportunismo: el primer período parecía terminar con empate a cero, pero el ecuatoriano Mercado se mandó un doble, más que dos goles. A los 44 minutos y a los 46 anotó bajo el arco visitante y cambió las caras del entretiempo. Como buen aguatero malherido me resultó imposible no pensar en la mano que nos hubiera dado para marcar al maldito Hatila Passos.

El partido evolucionó de diferencias estilísticas a diferencias futbolísticas. Pero en las primeras nació la raíz de las segundas. Aun ante el empate parcial Wanderers lució más conectado. Con un muy buen comienzo de Blanco y Maxi Rodríguez y correcta compañía de Pacheco y Mercado. Los de Sayago, en cambio, parecieron partirse. Salvo por el interminable Carlitos Díaz, el equipo no tuvo nexos. Los tres mediapuntas pesaron poco. Otro tanto ocurrió con el delantero Gómez, aunque tuvo una clara.

Sobre el cierre del primer tiempo, dos buenos aportes de Manuel Fernández y Acosta anticiparon que el partido se movería más. Pero, precisamente entonces, el dueño de casa demostró que tenía mejores recursos para ir y venir. Tras abrir la cuenta y liberar el talento de varios de sus futbolistas, se benefició de una discutible lectura de juego a cargo del DT rival: Giordano apostó al delantero Pastorini y al enganche Ortiz, pero no acomodó bien las piezas. El primero, más bien grande, jugó por la derecha, lejos del área. Hernández, hábil pero bajo, dejó su posición intermedia y se convirtió en una especie de centrodelantero. Procuró pesar más en el área con el ingreso de Crossa, con tanta mala suerte que, dos minutos más tarde, Cabrera marcó el gol definitivo a los 77.

Wanderers (3): Martín Rodríguez; Sandoval (subió), Lago, Sergio Rodríguez y Diogo; Santi Martínez (79’ Guzmán Pereira) y JR Curbelo; Pacheco (sí) y Maxi Rodríguez (vuelve a ser) (59’ Gagnebin) (bien); y Mercado (red) (73’ Cangrejo Cabrera) y Chapita Blanco (partidún).

Racing (0): Contreras; Marcelo Gamarra, Brasesco, Quagliotti y Manuel Fernández; Carlos Díaz (parejito) y Pato Sosa; Aníbal Hernández (de 8 y ¿de 9?) (75’ Crossa), Carlos Acosta (algo) y Fede da Luz (46’ Cristian Ortiz) (de media punta zurdo); y Fede Gómez (tuvo una) (46’ R Pastorini) (demasiado abierto).

Goles: 44’ y 46’ Richard Mercado, 77’ Cangrejo Cabrero.

Empantanados

Sonaba de fondo la plena “A mi barrio”, hecha por el ex Karibe con K Gerardo Nieto cuando los locales villeros y capurrenses saltaron al campo de juego en busca de una victoria para lograr enderezarse en la tabla. Los albivioletas fueron los dueños del primer tiempo. ¿Por qué? Rosario Martínez propuso un 4-2-2, un equipo corto que le achicó los espacios a un Cerro que planteó un juego vertical basado en la velocidad de sus mediapuntas. Los cuatro hombres del fondo que vestían la blusa roja eran una muralla, encima en el medio Fabián Trujillo, un ex Cerro, ganaba todas las divididas activando el murmullo de los hinchas albicelestes que se lamentaban de “cómo lo dejamos ir a Fabián”. En el ataque, los de la calle Juan María Gutiérrez también estaban enchufadísimos, especialmente el Pelo Ortiz, que por la banda derecha hacía de las suyas apretando el acelerador. El ex Cerrito, River Plate y Peñarol en dos ocasiones dejó de cara al gol al armenio Mauro Guevgeozián, que la segunda vez no perdonó y la mandó a guardar al fondo de la red del arco de la tribuna Paraguay.

Fénix continuó bien; es más, podría haberse ido al vestuario con algún golcito más. De Cerro, muy poco. Sobre el cierre de la primera etapa se fue a las duchas Yeferson Moreira por trancar una salida bajando a Fernando Sellanes. En el complemento, Cerro creció mucho y ganó terreno ante un Fénix desgastado físicamente, que retrocedió y disminuyó la presión en la salida del rival. Cerro fue y fue, los jóvenes César Faleti y Mauri Alonso hacían sentir su juventud y atrevimiento de potrero.

Pero el que empató fue Gonzalo Mastriani en el minuto 50. Después los palos salvaron a Fénix, pero ni Cerro era una locomotora ni la visita un flan. El final fue un empate con gusto a poco, sobre todo para los capurrenses, que con uno más durante 50 minutos no supieron acreditarse la primera victoria en el torneo que, desde el fondo de la tabla, todavía no han podido disfrutar.

Cerro: Mathías Rolero, Andrés Ravecca (67’ Emiliano García), Guillermo de los Santos, Eduardo Mieres, Yefferson Moreira, Sebastián Suárez, Óscar Javier Morales, César Faletti (79’ Luis Machado), Gustavo Varela, Gonzalo Mastria-ni y Mauricio Alonso (67’ Marcel Román). DT: Hugo Parga. Sup: Matías Cubero, Michel Duarte, Sergio Pérez y Leonardo Medina.

Fénix: Luis Mejía, Alejandro Silva, Jonathan Píriz, Ignacio Pallas, Cristian Machín, Fabián Trujillo, Gonzalo Papa, Hernán Novick (79’ Cecilio Waterman), Fernando Sellanes (63’ Nicolás Mezquida), Mauro Guevgeozian (71’ Mateo Carro) y Juan Manuel Ortiz. DT: Rosario Martínez. Sup: Juan Obelar, Adrián Gunino, Maximiliano Perg, Román Cuello.

Goles: 27’ Mauro Guevgeozian, toque corto (F), 50’ Gonzalo Mastriani, remate cruzado (C).