Ayer se conoció la sanción que se le impuso al atleta tacuaremboense Andrés Silva tras el doping positivo que se le detectó en agosto. Finalmente, el Comité Disciplinario de la Organización Nacional de Antidopaje del Uruguay (ONAU) estableció que la sanción para Andrés Silva sea de seis meses, según informó el portal Por decir algo.

Como la inhabilitación corre a partir de la fecha en que fue detectada la sustancia prohibida, el 17 de agosto, Silva no podrá competir oficialmente hasta el 17 de febrero del próximo año. De ahí en adelante el velocista especialista en 400 metros con vallas podrá participar a nivel nacional e internacional para buscar la marca que le permita clasificar a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, que es de 49.50. La sanción final fue mucho menor que lo que se esperaba. La penalización para el tacuaremboense tenía posibilidades de alcanzar los dos años de duración. El atenuante que posibilitó la disminución de la pena fue que Silva pudo demostrar que la sustancia prohibida que ingirió estaba en un complemento vitamínico, y no aparecía mencionada en el prospecto.

El atleta ya se perdió el Mundial de Atletismo de Pekín porque fue justo antes de esa prueba que la Federación Internacional de Atletismo lo suspendió preventivamente hasta que se aclarara la situación. Con las fechas ya sabidas, Silva y su entrenador, Andrés Barrios, comenzarán a delinear el cronograma de cara al futuro, de modo tal de prepararse para las carreras que quedan por cumplirse antes de los Juegos Olímpicos y poder alcanzar la marca que lo lleve a la cita carioca, que se realizará entre el 5 y el 21 de agosto del año próximo.