OSE publicó en su página web un nuevo “estado de situación” de los niveles de cloruros y de sodio en el agua que abastece a la población de la zona metropolitana. La información analizada abarca un día: desde las 7.00 del lunes hasta las 7.00 de este martes.
El Decreto 375/11 es el encargado de regular la calidad del agua. Allí se establece que el valor máximo permitido de sodio para que el agua sea considerada potable es de 200 mg/l y, en el caso de los cloruros, el nivel máximo es de 250 mg/l. Pero, ante la situación de déficit hídrico, OSE solicitó de forma excepcional aumentar el nivel de sodio a 440 mg/l y el de cloruros a 750 mg/l.
En junio, el Ministerio de Salud Pública autorizó a OSE mantener esta excepcionalidad y además habilitó incrementar los niveles de trihalometanos. Si ya había preocupación por el impacto del agua en la salud, este anuncio generó una alerta mayor.
Para la elaboración del informe la empresa estatal extrajo muestras de las líneas de bombeo 4 (2.853 muestras), 5 (2.880 muestras) y 6 (2.874 muestras). En “promedios diarios”, OSE detectó que en la línea de bombeo 4 el nivel de cloruros fue de 721 mg/l y de sodio 441 mg/l.
En tanto, en la línea de bombeo 5, el promedio diario de cloruros alcanzó 599 mg/l y de sodio 372 mg/l. Finalmente, en la línea de bombeo 6, el promedio diario de cloruros fue de 731 mg/l y de sodio 446 mg/l.
Por lo tanto, los valores de sodio en la líneas de bombeo 4 y 6 estuvieron apenas por encima de la nueva medida y en el caso de los cloruros se mantuvo en todos los casos dentro de los nuevos parámetros, que, a su vez, podrían cambiar en los próximos días.
Este lunes, en una conferencia de prensa, el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, decretó la “emergencia hídrica” y si bien señaló que el suministro de agua “está asegurado”, dijo que “seguramente” se eleven las cifras de cloruro y sodio.
“Básicamente, es una regla de tres: esta calidad de agua para tantos días, equis para 30 días. Entonces, estamos evaluando con los técnicos del Ministerio de Salud Pública hasta dónde podríamos llevar esos registros para que siga siendo bebible esa agua, que es nuestra primera meta. Insisto, todos estos cálculos los estamos haciendo en base a que no vaya a llover”, expresó el mandatario.