En la noche del martes, un grupo de personas que están recluidas en dos pabellones de la Unidad 14 de reclusión Piedras de los Indios, ubicada a unos 13 kilómetros del centro de Colonia del Sacramento, generaron disturbios, “provocando daños en la estructura” del edificio y “quemando ropas”, según relató un comunicado emitido por la Jefatura de Policía de Colonia.
En ese contexto, dos hombres, que son hermanos y que habían sido condenados por delitos de narcotráfico y hurtos en mayo de este año, salieron de uno de los pabellones a través de un boquete en una de las ventanas.
Tras salir del edificio, ambos pudieron transgredir las bajas medidas de seguridad con que cuenta ese establecimiento carcelario y concretar la fuga. Personal de choque del Instituto Nacional de Rehabilitación y de Jefatura de Policía de Colonia intervino para apaciguar los disturbios, en una operación que “no dejó personas heridas”, según explicaron autoridades policiales a la diaria.
Posteriormente, “con el apoyo de más de 20 policías”, se realizó una guardia perimetral en dicho centro “para evitar más fugas” e “inmediatamente se dispuso un despliegue policial en todo el departamento de Colonia, que, en la mañana del miércoles 12, permitió recapturarlos en inmediaciones del balneario Santa Ana, mientras circulaban ambos en un caballo que había sido hurtado”, expresó el comunicado policial.
Los hermanos, de 21 y 28 años y oriundos de San José, habían sido judicializados mediante la operación antidrogas Heracles. Uno de ellos tiene una pena de tres años de penitenciaría, mientras que el otro cumplía una pena de 12 meses; ambas serán aumentadas tras el delito de autoevasión que cometieron en las últimas horas.