Esta semana, en el marco de la Operación Delta, encabezada por la Fiscalía departamental de segundo turno y la Jefatura coloniense, se realizaron operativos puntuales en varias localidades de ese departamento –Colonia del Sacramento, Juan Lacaze, Rosario y Nueva Helvecia–, así como en Montevideo, Canelones y Maldonado. Tras ello, la Justicia dispuso condenas con prisión a 28 personas -15 varones y 13 mujeres-, por delitos como como suministro y negociación de sustancias estupefacientes, organizacíon del narcotráfico tráfico de municiones y armas de fuego, asistencia al narcotráfico, receptación, hurto, porte de arma de fuego, violencia privada, delitos de conversión y transferencia (lavado de activos), con penas que van desde los dos años hasta seis años y nueve meses de penitenciaría.

Las condenas más duras fueron aplicadas a dos hombres que se encontraban recluidos en centros penitenciarios, y que eran jefes de dos clanes familiares dedicados al tráfico de drogas y otros delitos conexos.

El jefe de Policía de Colonia, Paulo Costa detalló que la operación Delta comenzó hace tres meses, y que en los allanamientos se incautaron “una cantidad de importante de sustancias, armas, municiones, vehículos, electrodomésticos, aparatos celulares”.

Costa explicó que esos grupos delictivos pudieron ser desactivados gracias al trabajo de inteligencia policial desarrollado mediante escuchas telefónicas. “Luego de haberse periciado sus aparatos celulares, se pudo saber que la organización tenía como cabeza a dos privados de libertad, uno que estaba en la cárcel de Punta Rieles y el otro estaba detenido en Canelones”. “Se trata de dos familias que estaban operando de distintas formas, y mediante el cruzamiento de datos se permitió dar, por ejemplo, con cuentas bancarias, vehículos que tenían y que habían sido comprados con el producto de ese dinero”, añadió el funcionario, quien valoró que esa operación permitió afectar “a todo el núcleo familiar rodeaba a ambas familias y que estaban conectados”. Uno de los resultados más novedosos de este operativo realizado en el departamento de Colonia fue la alta cantidad de mujeres condenadas por distintos delitos, lo cual, según fuentes policiales, está relacionado “al carácter familiar” de esos grupos delictivos, donde existen numerosos vínculos de consaguineidad entre sus integrantes.

La mayoría de las personas condenadas en este operativo tiene entre 19 y 40 años, no contaba con antedecentes penales hasta el momento, y muchos de ellos habían cursado varios años de educación media, lo cual está por encima del promedio de escolarización que alcanza la población carcelaria, establecieron las fuentes policiales.

Según pudo saber la diaria, estos dos grupos familiares dedicados al narcotráfico que operaban en el departamento de Colonia mantenían vinculaciones con peligrosos clanes delictivos que operan desde Montevideo.

Lavado de activos

En declaraciones a medios locales, Costa resaltó que la Justicia haya condenado a varias personas por lavado de activos, un delito sobre el cual el propio jefe de policía coloniense advirtió hace poco tiempo en entrevista con la diaria, lo que derivó en cuestionamientos por parte de actores políticos. “Hubo varios objetos incautados, porque la ley establece que ocurra eso en el lavado de activos, que pueden ser bienes muebles e inmuebles, y creo que ese es el hecho que más afecta a los delincuentes”, expresó. El último antecedente de condenas sobre lavado de activos en el departamento de Colonia se remonta a 2021, cuando un pastor evangélico y dueño de dos locales de Abitab en Juan Lacaze fue condenado a cuatro años y medio de prisión por asociación para delinquir, lavado de activos y estafa, en un operativo liderado por la entonces fiscal de Rosario, Sandra Fleitas.