La vacuna desarrollada por la empresa farmacéutica estadounidense Moderna contra el coronavirus fue aprobada este miércoles por la Agencia Europea del Medicamento (EMA), por sus siglas en inglés. “Con la aprobación, tendremos otros 160 millones de dosis de vacunas; y llegarán más”, aseguró en un comunicado la alemana Ursula von der Leyen, quien preside la Unión Europea (UE).

Esta es la segunda vacuna que cuenta con la autorización de la EMA, que en diciembre había aprobado la utilización del inmunizante elaborado por el laboratorio estadounidense Pfizer junto con la empresa alemana BioNTech. La vacuna de Moderna ya se está aplicando en Estados Unidos y Canadá y está aprobada en Israel. Según anunció la empresa, las primeras dosis de la vacuna deberían de llegar a Europa la próxima semana.

La vacuna de Moderna sólo se puede aplicar a mayores de 18 años, a diferencia de la de Pfizer y BioNTech, que se puede administrar a partir de los 16 años. “Al igual que con todos los medicamentos, supervisaremos de cerca los datos sobre la seguridad y eficacia de la vacuna para garantizar la protección continua de la población europea. Nuestro trabajo siempre estará guiado por la evidencia científica y nuestro compromiso de salvaguardar la salud de los ciudadanos de la UE," aseguró Von der Leyen.

Moderna estima poder producir al menos 600 millones de dosis en 2021 y trabaja para alcanzar los 1.000 millones. En noviembre llegó a un acuerdo con la UE para la compra de 80 millones de dosis, pero posteriormente el bloque comunitario decidió aumentar el pedido a 160, con el objetivo de dar respuesta a una demanda creciente.

Además, la EMA sigue estudiando la vacuna desarrollada por AstraZeneca en colaboración con la Universidad de Oxford, que sólo tiene la aprobación de emergencia de la autoridad regulatoria británica. La UE espera seguir aprobando vacunas a la brevedad, para poder acelerar la campaña de inmunización que hasta el momento no ha logrado el ritmo deseado en la mayor parte de los 27 países que integran la unión.

De hecho, la comisaria europea de Salud, Stella Kyriakides, instó a los gobiernos a velar por que “el ritmo de vacunación sea adecuado”, luego de que surgieran polémicas en varios países por el retraso.