El Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) ya terminó su tarea, pero el área de Datos sigue trabajando: “Estamos de guardia, mirando cómo evolucionan indicadores”, dijo a la diaria Andrés Ferragut, que trabaja en el subgrupo de Modelos y Proyecciones y en el de Movilidad y Apps. En este momento, el R, que es la tasa de reproducción del virus en un período de tiempo equis, está en 0,71 según el monitor de datos de la Agesic; el número tranquiliza, porque ha estado bastante por debajo de 1 y durante un tiempo prolongado, el 10 de junio fue el último día que estuvo por encima de 1.
El promedio de casos cada 100.000 habitantes en los últimos siete días ha ido bajando y eso, que se denomina P7 en la escala que desarrolló el Global Health Institute de Harvard para ver la incidencia del coronavirus, está bajando de los peores niveles, los que se grafican con rojo, que superan el promedio de 25 casos. Después de estar más de cuatro meses en rojo, Uruguay volvió este miércoles al nivel anaranjado (un P7 situado entre 10 y 25 casos), cuando el promedio se situó en 24,07.
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“El amarillo no está lejos. Este mes Uruguay entraría en amarillo”, anunció Ferragut. El amarillo se corresponde con un P7 de entre uno y diez casos y, a nivel país, se consigue con un valor por debajo de 350 casos semanales en promedio cada 100.000 habitantes. El ingeniero comentó que la movilidad ha bajado en los últimos días, y mencionó el último reporte de movilidad de Google que, en coincidencia con la primera semana de vacaciones de julio, registra a nivel nacional un descenso de la movilidad en tiendas y ocio (-20%), parques, plazas y playas (-44%), estaciones de transporte (-19%), lugares de trabajo (-4%) y un incremento de +7% en supermercados y farmacias y en lugares de residencia.
“La vacuna está surtiendo efecto”, dijo Ferragut, que señaló que en junio se dio el primer aumento de movilidad que no estuvo asociado a un incremento de casos de covid-19, y que eso ocurrió a partir del efecto de la vacunación.
No obstante, Ferragut señaló que es una interrogante lo que pueda ocurrir con el ingreso de nuevas variantes. “Van a llegar y van a golpear”, vaticinó, pero agregó que cuanto más se demore el ingreso de variantes será mejor, porque habrá más población vacunada y eso permitirá estar más cerca del control por rastreo, de la posibilidad de aplicar la estrategia de testeo, rastreo y aislamiento de casos, que permitió controlar la epidemia en 2020.