De una pastería ubicada en un bosque de pinos en Punta Ballena, sobre el km 117 de la ruta Interbalnearia, sale una variedad de pasta rellena con la cual hasta el cocinero más descriteriado lograría lucirse. Es que con la intención de revitalizar la mano de obra de la zona, que en invierno suele estar subutilizada, un equipo que viene de distintas disciplinas empezó hace poco más de un año a elaborar más de 50 variedades de ñoquis. Los preparan con ingredientes frescos e inmediatamente los congelan. Con ellos abastecen hoteles y restaurantes de alta gama (entre ellos el Conrad y Casapueblo) y, en paquetes de medio kilo, los distribuyen por encargo una vez a la semana en Montevideo.

“Salimos a hacer un producto que sea de primer nivel, aunque no es la idea de que por ser de Punta del Este sea caro”, aclara Alfredo Amaya. “Buscamos una propuesta que fuese original y que identificara a la gastronomía propia; Uruguay es de los pocos lugares donde se hace pasta rellena en el mundo: se hace en Italia, en La Toscana, un poco en Argentina y en el sur de Brasil. No es algo común, salvo en China”, argumenta, antes de recordar los extinguidos romanitos de La Spezia y los sorrentinos de Pachamama, un dato que hace años conocen los que frecuentan el este.

Lo que distingue a Buddhakiss es que la masa no resulta pesada, ya que tiene base de papa, de boniato o calabaza y una cantidad mínima de harina o de harina de arroz. Y recorrer la carta es el anticipo de un festín, ordenado en cinco grupos: tradición mediterránea, nuestras carnes, del mar, de la huerta y de autor.

“Dentro del equipo tenemos una nutricionista y no usamos nada que caiga pesado, por ejemplo, crema doble. Si vamos a cocinar cordero, es recién faenado, buscamos verduras sin pesticidas, y usamos una variedad de papas que nos dan esa suavidad que tiene la masa”, explica Amaya. Además, a diferencia de los ñoquis comunes, la masa se pasa por la máquina sobadora. Hay toda una línea apta para veganos, provista de quesos vegetales, y la de productos de mar incluye sirí de Valizas (tienen un acuerdo con los pescadores), camarón, almejas y berberechos, aunque no todos son productos de catálogo sino que algunos salen como pasta fresca del día, durante el verano, como un lenguado al pimentón que tuvieron en partida limitada.

Calculan cuatro porciones por kilo, que cuesta entre 450 y 550 pesos (los más caros son los de mar y los de carne). Como la apuesta no es modesta, se atrevieron a gustos exóticos, como higo turco con roquefort, y también desarrollaron una línea de pasta dulce que suelen usar para degustaciones o catas de vino, presentadas en un plato con una sopa de chocolate o de dulce de leche o con una crema con frutos secos, a modo de postre invernal. Ofrecen, por ejemplo, de cacao con naranja confitada o de cacao con frutillas, y en esos casos la masa es de boniato zanahoria con vainilla. “Es lo que menos compran para llevar pero, por ejemplo, cuando cantó la hija de Marcelo Tinelli en Casapueblo, comieron como 50 kilos de esos”, cuenta Amaya.

La sugerencia es que las salsas para estas pastas sean suaves “porque el buddhakiss es un producto muy completo y es complejo hacer una salsa que no lo corrompa. Para los productos de mar usamos una salsa crema de albahaca y limón, tenemos la fileto que acompaña algunos sabores tradicionales, tenemos otra de pimientos y tannat para los de cordero y los de carne (la masa es de papa con pimientos rojos asados y vino, es intensa) e incipientemente, lanzado en febrero, tenemos el formato de pizzeta con la misma masa de boniato zanahoria y de calabaza, con cuatro propuestas de sabores”.

Dicen estar aprendiendo de sus clientes y que por eso mismo, ya que 70% de quienes frecuentan el local en temporada, son argentinos, ahora están enfocados en vender en Buenos Aires. Además están “en una búsqueda activa de mercados gourmet” para colocar sus productos en freezers, para venta directa al público.

El pedido mínimo es de un kilo pero por esa cantidad cobran el envío (están envasados de a medio kilo); por tres kilos va una pizza de regalo, en promoción. Para encargar: buddhakiss.com.uy y 099 852 010.