El Tribunal General de la Unión Europea (UE) confirmó este miércoles una multa a Google de 2.400 millones de euros (más de 2.700 millones de dólares) por violar las normativas antimonopolio del bloque. La resolución pone cierre a un caso que tardó seis años en llegar a su final.

La confirmación llega dos años después del fallo de la Comisión Europea, que en 2019 ya había determinado que el gigante tecnológico estadounidense daba una ventaja injusta a Google Shopping, su servicio de compra de productos, en su buscador. La compañía, que forma parte de la empresa matriz Alphabet, había apelado la decisión, apelación que finalmente fue desestimada por el Tribunal.

El fallo señala que “si bien los algoritmos para la clasificación de resultados genéricos o los criterios para el posicionamiento y la visualización de los resultados de productos especializados de Google pueden, como tales, representar mejoras de servicios favorables a la competencia, eso no justifica la práctica en cuestión”, que representa el “trato desigual de los resultados del servicio de comparación de precios de Google y los resultados de los servicios de comparación de precios de la competencia”.

En este sentido, el Tribunal General consideró también que “Google no ha demostrado ganancias de eficiencia vinculadas a esta práctica que contrarresten sus efectos negativos sobre la competencia”.

El texto del dictamen también planteó que “tras haber realizado su propia apreciación de los hechos con el fin de determinar el nivel de la sanción”, se resolvió que una anulación parcial de la decisión de la Comisión Europea, limitándola sólo al mercado de servicios generales de búsqueda, “carece de impacto sobre el importe de la multa, ya que la Comisión no tuvo en cuenta el valor de las ventas en ese mercado para determinar el importe de base de la multa”.

A su vez, sostuvo que la infracción de la empresa estadounidense fue “especialmente grave”, porque entiende que “la conducta en cuestión fue adoptada intencionalmente, no por negligencia”.

Pese a que ahora deberá abonar la millonaria multa, la empresa mantiene que no incurrió en conductas monopólicas. Según informó el portal especializado Hipertextual, Google señaló que “los anuncios de Shopping siempre han ayudado a las personas a encontrar aquellos productos que estaban buscando de una manera rápida y sencilla y a los comerciantes a alcanzar a potenciales compradores. Este dictamen es sobre hechos muy específicos y aunque lo vamos a mirar con mucho detalle, ya realizamos cambios en 2017 para cumplir con la decisión de la Comisión Europea. Estos cambios han funcionado de manera exitosa generando 1.000 millones de clics para más de 700 servicios de comparación de precios”.

La UE también tiene abiertas otras dos disputas legales contra Google por conductas monopólicas, una que involucra al sistema operativo Android, al igual que la multa que la compañía sufrió en Corea del Sur en setiembre, y por otro lado al servicio Adsense.