“Comenzó siendo una idea entre nosotros, y en abril de 2021 decidimos formalizar el asunto y salir a las calles con una propuesta de reparto alternativa a las opciones motorizadas que veíamos en la ciudad”, cuentan Santiago Cardozo y Santiago Montañés, creadores y mano de obra de Austral Bicimensajería. Su metodología es simple: agendan los pedidos por vía telefónica, con la capacidad de realizarlos en el día o al siguiente. “La información que solicitamos es básica: dirección de retiro, dirección de entrega, rango de horarios en ambos puntos, contactos telefónicos y tamaño/peso/contenido del paquete. Dividimos la ciudad en zonas (o anillos) crecientes desde el Centro/Sur/Palermo/Parque Rodó hasta Carrasco/Maroñas/Cerrito/Belvedere/La Teja, y según el volumen es el valor de la tarifa. Ese cálculo se realiza en el momento de la solicitud y puede ser abonado en el retiro o en la entrega. Agrupamos para un mismo bicimensajero varios puntos de retiro o entrega, coincidiendo horarios y que la capacidad de carga sea la adecuada”, resumen.

Apuntan a alcanzar la mayor eficiencia por recorrido. Para lograrlo, confían en la organización previa y la coordinación, pero también valoran el actuar en colectivo. “Al contar cada bicimensajero con grandes capacidades de carga, se puede, en una misma vuelta, hacer más de diez entregas (de tamaño estándar) en menos de dos horas. Siendo un mismo ciclista el que hace ese trabajo, se reduce un montón el espacio que ocupa en la calle en comparación a un motorizado, con una emisión de CO2 seis veces menor y una contaminación sonora incomparable”, recalcan como ventajas.

En este tiempo fueron aquilatando una clientela variada: Obrador Social Club, Majo Rey, Little Butterfly Records, La Gran Ola, El Celíaco Feliz, Click Fotografía, Alma Cosméticos, Almacén Cervecero, Nuevo Reino, Núcleo Serigrafía, Tuset Joyeros, Tandem, entre varios emprendimientos más de diversa índole.

Actualmente siguen siendo dos en las calles, los mismos del comienzo. Cualquiera de ellos hace la tarea de dispatcher (quien recibe, confirma y gestiona las solicitudes) o de mensajero, y aseguran que cuentan con algunos amigos como “cartas bajo la manga” cuando la demanda los satura.

“Si bien trabajamos en casi toda el área metropolitana, nuestro gran objetivo es el centro de la ciudad. Estamos plenamente confiados en que es una ciudad pedaleable, y el centro está experimentando una crisis espacial, en la que somos mucho más veloces que nuestros colegas motorizados. Reconocemos antes que nadie que la cultura uruguaya aún no asocia lo que es una bicimensajería, pero timbre a timbre y semana a semana lo venimos demostrando. O lo intentamos”, dicen quienes destacan en su cuenta de Instagram @austral.bicimensajeria que “no es una empresa”.

Para el año que viene aspiran a mudar la operativa a una sede más grande para fusionar un centro logístico con un taller mecánico y una zona de descanso. “La apertura de un nuevo espacio nos ayudará a profundizar en las otras ramas de este proyecto o, como nos gusta llamarles, las piernas de Austral. La pierna laboral quedó explicada, la pierna solidaria se trata de envíos sin costo de alimentos o ropa hacia ollas populares, y la pierna cultural agrupa diferentes eventos que realizamos con la bicicleta y la bicimensajería como eje en común”. Para esta dupla es importante destacar que no quieren ni monopolizar ni expandirse enormemente. “Buscamos contagiar”, recalcan.

Totalmente aparte, aunque también en dos ruedas, hace seis años que organizan unos eventos lúdicos llamados “alleycats”, que definen como “llevar el día de trabajo de un bicimensajero a una ‘carrera’” o como “una especie de búsqueda del tesoro por la ciudad”, ya que recién al largar se enteran de las direcciones a las que tienen que ir a buscar algo o a alguien y tienen que sacarle una foto o probar de alguna manera que cumplieron lo asignado. “Es un formato muy abierto, nunca es igual un alleycat a otro”.

Nueva categoría Cabify Bodegas traslada a Montevideo y Canelones

La plataforma de movilidad Cabify anunció la puesta en marcha de Cabify Bodegas junto a la Asociación de Turismo Enológico del Uruguay. La alianza se da al comienzo de la temporada enoturística y atentos a la restricción de cero consumo de alcohol para conductores. Este sistema apunta a fortalecer el sector facilitando el acceso a los establecimientos de Montevideo y Canelones que pertenecen a Los Caminos del Vino, sumando una alternativa de traslado.

La solicitud del servicio se gestiona a través de la app de Cabify y se paga con tarjeta de crédito. Los extranjeros que utilizan Cabify en sus países tendrán también la opción Bodegas disponible al llegar a Uruguay. Dentro de la app se podrá visualizar también la oferta completa de productos y servicios que ofrece esta agrupación de bodegas de la región. Se podrá solicitar el auto con anticipación o en el momento del viaje, teniendo la reserva previa en la bodega elegida.

El vehículo de Cabify hace el traslado y el automóvil permanece en espera a disposición del pasajero hasta que este finaliza su excursión. El viaje tendrá como punto de partida y de regreso el que fije el pasajero, y un precio único establecido de acuerdo a la distancia, con una permanencia que puede ser de tres o de cinco horas. Este valor único es independiente de la cantidad de pasajeros, que puede ser hasta un máximo de cuatro por vehículo.

En esta primera etapa las comprendidas son Antigua Bodega, Bodegas Carrau, Bouza, Bracco Bosca, De Lucca, Familia Deicas, Familia Moizo, H Stagnari, Pizzorno, Spinoglio y Varela Zarranz. Para más adelante se prevé la implementación del servicio a las bodegas de Maldonado.

La empresa promocionará precios especiales y descuentos para fechas determinadas.

De paseo con China

Recorrer Montevideo de la mano de China Zorrilla es lo que propone un circuito que toma su nombre de una frase bien descriptiva de la gran artista uruguaya: “Me divierte estar viva”. El paseo, uno de los tantos homenajes que recibe en el centenario de su nacimiento, fue presentado en Buenos Aires por la División Turismo de la Intendencia de Montevideo.

Independiente, como China, es un circuito autoguiado por lugares icónicos de la capital. Por medio de 16 tótems geolocalizados, ubicados en teatros, monumentos y locaciones vinculados con la trayectoria de la artista, se podrá acceder a una plataforma donde se cuentan fragmentos de su vida y de su obra.

Con un teléfono celular, en cada uno de estos lugares se accede a información y se escuchan pensamientos, historias y anécdotas contadas por la propia China o por alguien cercano a ella.

De esta manera, en el Club de Golf del Uruguay, relata el día que conoció al escritor argentino Jorge Luis Borges, y en el teatro Solís revelará lo que significó para ella volver a la Comedia Nacional. El circuito también lleva a la casa de Juan Zorrilla de San Martín, el poeta de la patria, para descubrir a la niña que le recitaba a su abuelo, entre otros momentos significativos.

El sitio oficial para sumergirse en su mundo es www.chinazorrilla.uy.