Pablo Cuevas no pudo con el griego Stefanos Tsitsipas y perdió en el partido decisivo del ATP de Estoril. Fue 6-3 y 7-6 en menos de dos horas de partido.

El griego inició el juego con total confianza, logrando un rápido quiebre sobre el saque del uruguayo y administrando de manera excelente esa ventaja obtenida para, al final, ganar con un 6-3 muy contundente.

En el segundo set parecía que la historia iba a ser la misma: Cuevas un poco desconectado con su juego y Tsitsipas muy claro. De arranque el griego obtiene nuevamente el quiebre y parecía se iba rápidamente el partido. Pero Cuevas encontró su juego y el griego bajó su nivel. Luego de que Tsitsipas salvara un set point se fue la definición al tie break, donde el griego jugó de forma implacable para llevárselo por 7 a 4 y obtener de esta manera su segundo título del año y el primero en polvo de ladrillo.

Cuevas finaliza una muy buena semana, jugando una final luego de más de dos años, trepando al puesto 51 del ranking y con muy buenas perspectivas de cara al resto de la temporada sobre polvo de ladrillo.