La historia se escribe todos los días, pero hay días más importantes que otros.
El US Open de este 2021 nos tenía preparada una página bastante grande para la historia del tenis.
Por el lado de las damas la consagración fue para Emma Raducanu, de Reino Unido, mientras que por el lado de los caballeros el campeón fue el ruso Daniil Medvedev.
La sorpresa
¿Qué decir de Raducanu? Simplemente espectacular lo que logró en Nueva York. Es la primera vez en la historia del tenis profesional, tanto masculino como femenino, que alguien gana un Grand Slam viniendo desde la qualy. A eso le sumamos que no sólo no perdió ningún set en los diez partidos que disputó, tres en la qualy y siete en el cuadro principal, sino que tampoco disputó un solo tie break.
La británica Emma Raducanu se abraza al trofeo que le acredita como la campeona del Abierto de Estados Unidos tras derrotar en la final a la canadiense Lelyah Fernandez en la pista central de Flushing Meadows.
Foto: John G. Mabanglo, EFE
El título llegó tras derrotar en la final a otra joven sorpresa, la canadiense Leylah Fernández, en sets corridos 6-4 y 6-2. Fue un torneo implacable el de la británica, conquistando así su primer título como profesional. De esta manera se unió a la corta lista -Wilander en 1982, Kuerten en 1997, Ostapenko en 2017 y Swiatek en 2020, todos en Roland Garros- de tenistas que conquistaron su primer título en un Grand Slam. Con esta conquista, Raducanu trepa de la posición 150 a la 23 del ranking, y Fernández lo hace del 73 al 28.
El tenis femenino sigue dando sorpresas y generando nuevas campeonas. Es la decimonovena campeona diferente en activo y es el quinto año consecutivo en que una misma tenista no puede ganar más de un torneo grande en la temporada. La última en hacerlo fue la alemana Angelique Kerber en 2016, cuando ganó el Australian Open y el US Open.
La confirmación
Por su parte, Daniil Medvedev también obtuvo su primer Grand Slam, en su tercera final, tras derrotar al número uno del mundo Novak Djokovic en un partido perfecto con un triple 6-4. Si bien se enfrentaban el 1 y el 2 del mundo, el serbio era el claro favorito a quedarse con el torneo, ya que llegó a Nueva York habiendo ganado Australia, Roland Garros y Wimbledon, y buscaba en el US Open lo que ningún otro tenista ha logrado desde 1969, cuando lo hizo Rod Laver: ganar los cuatro grandes en la misma temporada.
Con este título el ruso se afirma fuertemente en el segundo puesto del ranking y buscará en lo que resta de la temporada seguir descontándole puntos a Djokovic y soñar, de esa manera, con ser el número uno en no mucho tiempo. Tiene con qué hacerlo.
A pesar de que Djokovic fue el gran atractivo del torneo por cómo llegaba y lo que podía alcanzar, la actuación del ruso fue sobresaliente. Llegó al partido definitorio habiendo perdido tan sólo un set en todo el torneo, en cuartos de final contra el neerlandés Van de Zandschulp, y jugando un tenis muy sólido. De esta manera Medvedev se convierte en el tercer ruso en ganar un Grand Slam, tras Marat Safin y Yevgeny Kafelnikov, y el noveno jugador activo en obtener un título de estas características, quedando Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic con 20 cada uno, y en el cuarto puesto empatan Andy Murray y Stan Wawrinka con cuatro.
Sin dudas esta victoria puede significar un cambio de era en el tenis masculino, pero Djokovic buscará en Australia, ya tiene nueve, su título 21 de Grand Slam y así quedar como el más ganador de la historia.
Mientras tanto, el futuro del tenis femenino es más que prometedor con las jóvenes que surgen y la altísima paridad que está habiendo torneo tras torneo.
Grandes días tenemos por delante en el mundo del tenis.