Como consecuencia de la inactividad y el atraso de calendario debido al paro del gremio de los futbolistas profesionales como medida de fuerza para aprobar y ejecutar el ya acordado y resuelto nuevo Estatuto del Jugador, la segunda edición de la Copa AUF Uruguay no tendrá un campeón este año calendario, y el torneo que reúne a los representantes de todos los estamentos de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) –con sus dos categorías profesionales y sus dos amateur, y esta vez con 26 clubes de la Organización del Fútbol del Interior (OFI)– recién culminará en los primeros meses de 2024.

Aún no está firme la determinación de hasta qué etapa se podrá llegar este año, pero según manifestó a la diaria el presidente de la Mesa Ejecutiva de la Copa AUF Uruguay, José Ramos, lo que es seguro es que por lo menos se llegará hasta la disputa de los octavos de final y ahí se verá si se puede avanzar alguna fase más o si esos encuentros definitivamente pasan para 2024.

La tercera edición, la que corresponde justamente al año entrante, se jugará en el segundo semestre, por lo que en 2024 la Copa Uruguay se alzará dos veces: en verano la levantará el campeón de la edición 2023 y en la frontera de la primavera, llegando al verano, la mostrará el campeón de la tercera edición, la 2024.

Se nos viene fin de año

La Copa Uruguay terminará de disputarse el próximo año, aunque siguiendo con lo dispuesto inicialmente en estos meses, sí se jugarán los 12 partidos de la seguda fase –la que enfrenta a los equipos que vienen de la clasificación de clubes amateur de la AUF y la OFI con 12 clubes de la Segunda División Profesional–; también se disputará la tercera fase, que tendrá 16 encuentros con la aparición de los clubes de la Primera División Profesional, además de Central de San José y Universitario de Salto, finalistas 2022 de la Copa Nacional de Clubes, y Oriental de La Paz y Tacuarembó, campeones de la C el año pasado; por último, en lo que resta de 2023 se llevarán a cabo los ocho encuentros de octavos de final, por lo que, si ahí se determina que no se juega más Copa este año, quedarán para 2024 los cuatro partidos de cuartos de final, los dos de semifinales y la final del campeonato –que en principio y antes de estos cambios obligados por el almanaque se iba a jugar el 10 de diciembre–.

Lo que viene

La Copa, que esta vez se jugó en su inicio exclusivamente entre clubes amateur de la OFI eliminándose entre sí, y los de la AUF también entre ellos, ya tuvo 36 encuentros en dos módulos, y después del cruce entre los clasificados de la AUF y los de la OFI, han quedado para enfrentarse en la próxima fase a 12 equipos profesionales de la B, ocho participantes de la OFI, Ferro Carril de Salto, Juventud de Colonia, Libertad de San Carlos, Quilmes de Florida, Lavalleja de Minas, Juanicó de Juanicó, Nacional de Nueva Helvecia y Sportivo Barracas de Dolores, y cuatro clubes aficionados de la AUF, Basáñez y Colón, de la C, y Terremoto y Lito, de la D.

Los próximos 12 partidos, que aún no tienen fecha, serán los de la denominada Fase 2, entre Ferro y Bella Vista en Salto, Terremoto y Miramar en Montevideo, Juventud y Albion en Colonia, Libertad y Uruguay Montevideo en San Carlos, Basáñez y Cerrito en Montevideo, Quilmes y Rampla en Florida, Lavalleja y Juventud de Las Piedras en Minas, Lito y Sud América en Montevideo, Juanicó y Atenas seguramente en Canelones, Colón y Potencia en Montevideo, Nacional y Progreso en Nueva Helvecia, y Barracas y Rentistas en Dolores.

Seguramente se juegue en las próximas dos semanas, arrancando el 10 de octubre con una serie de encuentros –tal vez seis de esta fase– y los que queden para la semana del 17 de octubre.

Los otros 16 partidos en los que aparecerán los clubes de la A seguramente se disputen en las semanas de noviembre.

La inactividad, en realidad, no atrasó casi nada de la competencia nacional –apenas se atrasó en una semana de acuerdo al fixture–, pero sí comprimió al fútbol profesional, que deberá jugar entre semana para terminar a tiempo, lo que deja a la Copa Uruguay detrás de la prioridad del Uruguayo, que además debe definir a sus competidores para la Copa Sudamericana y la Libertadores.

Otra de las modificaciones que supondrá no terminar el torneo en este 2023 será la aparición de la Copa Uruguay en la Supercopa Uruguaya que se juega antes del inicio de cada temporada, y que se había previsto innovar con la participación del campeón del torneo más uruguayo de todos, y seguramente también el campeón del Intermedio.

La segunda Copa Uruguay otorga 120.000 dólares al campeón, y 50.000 para el mejor club de categoría amateur con destino de uso en infraestructura del club.