El liceo 1 Manuel Rosé de Las Piedras, Canelones, está en conflicto desde el jueves 26, cuando el gremio de estudiantes decidió ocupar la institución en reclamo por una resolución del Consejo de Educación Secundaria (CES) que establece que, a partir de marzo de 2020, el liceo pasaría a tener un turno menos; de esta forma se pondría en línea con la mayoría de los liceos que tienen horas de aula de 45 minutos en vez de 35 minutos, como pasa ahora en Las Piedras. La propuesta llegó al CES de la mano de la dirección del instituto; sin embargo, en una asamblea docente se había votado en contra de la reforma y los estudiantes no habían sido consultados sobre este cambio, por eso se tomaron las medidas.

Así las cosas, el consejero docente Carlos Rivero, que firmó la resolución del CES, fue ayer al liceo para reunirse con sus colegas y estudiantes. En esa instancia comentó que las autoridades decidieron postergar esta resolución hasta que se hagan los estudios necesarios para demostrar la viabilidad. Se propuso generar una mesa de trabajo con participación de docentes, estudiantes, funcionarios y autoridades del CES para evaluar con detenimiento la propuesta de la dirección. Particularmente se habló de suspender la resolución por lo menos hasta 2021, para asegurar que “se iban a dar los tiempos necesarios para decidir sin presiones”, comentó a la diaria Rita Bruschi, profesora del núcleo sindical. Ante esta novedad de las autoridades, el gremio docente decidió levantar el paro de 24 horas que había propuesto, mientras que el gremio estudiantil resolvió mantener la ocupación activa del liceo hasta que haya “un documento firmado” con lo conversado, algo que debería pasar en el correr de esta jornada, según prometieron las autoridades.

Federico Cauna, presidente del gremio estudiantil, explicó a la diaria que el principal problema, más allá de la decisión inconsulta a profesores y alumnos, son las condiciones edilicias, ya que no hay espacios adecuados para recibir a los 400 estudiantes del turno intermedio que se pretende eliminar; entre los tres turnos diurnos el liceo recibe a 1.200 jóvenes. La idea de la dirección del liceo es que la mitad de los alumnos del intermedio pase a la mañana y la otra mitad al turno vespertino, pero estudiantes y docentes aseguran que no están dadas las garantías para mantener una educación de calidad. Los estudiantes entienden que con buena voluntad la resolución se podría haber derogado, pero consideran un muy buen avance que se suspenda hasta que haya un estudio hecho con tiempo y consultando a las partes.