El 20 de febrero de 2020 todos los mayores de 21 años que deseen terminar el ciclo básico de la educación media –de primero a tercero– podrán rendir un examen general que acredite los saberes. La Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) presentó en diciembre AcreditaCB, una prueba que habilita a acceder a trabajos que exijan el ciclo básico culminado o a continuar la trayectoria educativa en los siguientes niveles. Las inscripciones están abiertas hasta el 26 de diciembre por medio de la página web y los únicos requisitos son llenar el formulario digital y tener primaria terminada.

La plataforma se abrió el miércoles 11 y en 48 horas se llegó a 316 personas anotadas. El presidente del Consejo Directivo Central de la ANEP, Wilson Netto, comentó a la diaria que calculan llegar a unas 4.000 personas, aunque con este primer impulso se podría pensar en el doble. De todas formas, durante la presentación se comentó que las personas mayores de edad que no terminaron el ciclo básico en Uruguay son alrededor de 800.000.

La prueba, que fue elaborada por técnicos de la ANEP y de los consejos de Secundaria y UTU, propone una serie de actividades y ejercicios que le permitirán a la persona demostrar que puede resolver situaciones aplicando conocimientos indispensables para el ciclo básico. Las autoridades destacaron que son ejercicios relacionados con los saberes generales que se piden en el ciclo. Va a constar de tres partes: comprensión lectora, resolución de problemas y escritura. Los estudiantes deberán alcanzar un mínimo de suficiencia en al menos dos de esas partes, y en la tercera llegar al “umbral cercano a la suficiencia”. En la página web hay distintos ejemplos de cada parte para que las personas puedan practicar.

Netto destacó que la prueba “es el resultado de un trabajo de mucho tiempo” que parte de la construcción de “un marco curricular de referencia nacional que deja establecidas las habilidades, capacidades y competencias a desarrollar en cada nivel educativo”, y eso permitió generar una prueba única que evalúe esos aspectos en particular.

Además, el jerarca de la ANEP enfatizó que en esta modalidad se reconocen “los aprendizajes generados en distintos ámbitos”. “Somos conscientes de que muchas personas pueden haber pasado por las aulas y no haberlo culminado, otras seguramente no, pero sí han transitado por distintas instituciones o actividades propias de la sociedad y hoy están manejando situaciones desde su familia o su trabajo con las habilidades, capacidades y condiciones de ciudadanía que promueve la educación básica en cualquier país desarrollado del mundo”, sostuvo.

Por su parte, Antonio Romano, director de Planificación Educativa de la ANEP, dijo que “esta prueba es la convergencia virtuosa de dos políticas centrales de esta administración: el sistema de protección de trayectorias y la política curricular”. Romano agregó que es un examen “exigente” y fue puesto a prueba con estudiantes que actualmente están cursando cuarto año en ciclo regular. “Es una prueba que integra saberes diferentes pero que logra trascender esta idea de pensar una prueba por cada asignatura, nos parece interesante como diseño y se apoya en la experticia que tienen los equipos técnicos”, subrayó. Tanto él como otras autoridades en la mesa señalaron que esperan que la prueba oficie como entrada y también como estímulo a la continuidad de los aprendizajes.