Las elecciones de la representación docente en el Consejo de Formación en Educación (CFE) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), realizadas en noviembre del año pasado, marcaron el triunfo de la Lista 133, surgida de la Asamblea Técnico Docente nacional del CFE y encabezada por la profesora de Química Rosana Cortazzo. En un acto realizado ayer en el Instituto de Formación en Educación Social, Cortazzo tomó posesión formal de su cargo, sustituyendo al maestro Edison Torres, quien ocupó el cargo durante cinco años, siete meses y siete días, según él mismo señaló. Torres hizo un breve balance de su gestión como representante de los docentes en el organismo y, en la misma línea de lo que había señalado a la diaria en enero, destacó los avances en relación a la plataforma por la que fue elegido.
A su turno, Cortazzo habló de que su asunción debía ser una instancia de celebración para el colectivo del CFE, sobre todo en una institución “casi invisible” para “la gran prensa” y “cierta parte del espectro político”, tanto a nivel discursivo como presupuestal. La nueva consejera docente planteó una serie de propuestas que serán una especie de plataforma para su gestión, con el foco puesto en “avanzar hacia una cultura universitaria” en la institución, incluso si no se concreta la creación formal de un instituto con esas características. En ese sentido, sostuvo que la creación de la Universidad de la Educación (Uned) debe estar siempre en la agenda, aunque sea como una “utopía a alcanzar”, y que para ello se debe “avanzar en el desarrollo de otras prácticas” y construir “nuevas estructuras y reglas de organización de la vida institucional del CFE”.
La nueva consejera afirmó que se debe “avanzar en la democratización y participación de los órdenes como eje transformador que transite hacia el cogobierno”, y que para ello, entre otros puntos, es preciso dialogar con egresados de la formación en educación, para que “mantengan vivos los vínculos con la institución”. Por otra parte, propuso que se genere un espacio para analizar la “estructura organizacional” con el objetivo de rediseñarla.
Tomando forma
Cortazzo consideró que el CFE debe “trabajar por la consolidación de estructuras académicas donde confluyan la enseñanza, la investigación y la extensión”. En esa línea, opinó que es necesario generar mayores instancias de coordinación entre los departamentos e institutos académicos y las comisiones nacionales de carrera del CFE, y que además de debería asignar presupuesto específico para actividades de investigación y extensión. También abogó por “concretar una nueva estructura docente en el corto plazo” y dijo que, con ese objetivo, hay que trabajar para “resolver el proceso de aprobación del nuevo capítulo 14 del Estatuto Docente” de la ANEP, que habla específicamente del CFE.
La nueva consejera también mencionó que el organismo que integra debería “planificar una política de posgrados” para los educadores; señaló que, al no tener un estatus universitario, el CFE no ha podido “desarrollar en forma autónoma” esa política; y lamentó que, para subsanar tal situación, sólo se haya podido realizar acuerdos con otras universidades públicas y privadas. Destacó la necesidad de “lograr un desarrollo planificado de la formación en educación en todo el territorio nacional”, e indicó que la carrera de magisterio es la única que ha podido consolidar una estrategia en todo el país. Además, Cortazzo habló de la necesidad de generar “sinergias” con la representación estudiantil en el Consejo, y subrayó que “el país no puede perder la oportunidad de que el Parlamento y el Poder Ejecutivo aprueben la creación de la Uned”. Se comprometió a hacer “todo lo posible” desde su cargo para que eso pase, pero acotó que se debe tener claro que la responsabilidad corresponde a “una decisión política de nuestros gobernantes”.
Desconfianza
El presidente del Consejo Directivo Central de la ANEP, Wilson Netto, también se refirió a la no aprobación de la creación de la Uned, y dijo que detrás de esa situación “quizás se esconda la ausencia de confianza” en los educadores uruguayos. Al respecto, preguntó en qué medida “tiene sentido decir que queremos profundizar la democracia, si reducimos y sesgamos la participación”. Precisamente, varios actores del sistema político, sobre todo desde la oposición, han planteado como uno de las condiciones para crear la Uned que ese organismo no tenga autonomía ni cogobierno. Para el jerarca, la dimensión política y de participación deben “encontrarse” en las instituciones, ya que, de lo contrario, “el resultado es el continuo inicio de los procesos”.