La Universidad de la República (Udelar) continúa siendo el actor más importante de la educación terciaria uruguaya, ya que en 2018 logró captar a 75% de los estudiantes de ese nivel, tanto a nivel público como privado. Si se analiza la educación universitaria, su predominio es aun mayor, con 90% de la matrícula. Así lo muestra el resultado de un monitoreo de sus estudiantes que hace la institución y que presentó por primera vez ayer su Dirección General de Planeamiento (DGP).

Nicolás Fiori, integrante de la DGP, señaló que este relevamiento permitirá acceder “en tiempo real” a información sobre los estudiantes de la Udelar, por lo que ya no será necesario hacer censos. La primera medición, correspondiente a 2018, mostró que la universidad tuvo ese año 135.757 estudiantes activos y que su matrícula alcanzó un crecimiento de 3,5% anual en promedio desde 2012, año en que se había realizado el último censo. En suma, la institución registró 17.680 nuevos ingresos el año pasado y la tasa de crecimiento anual en el flujo de ingresos fue de de 4,7%. No obstante, el porcentaje crece a 15% en los servicios que funcionan en el interior del país.

Fiori señaló que la tasa de captación inicial de la institución, que muestra el tránsito entre quienes finalizaron la educación media e ingresan al sistema universitario, está “al nivel de los países más desarrollados de la OCDE [Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico]”. Más allá de esa situación, señaló que “el problema que tiene Uruguay es la no finalización de la educación media”, que impide que más personas lleguen a la universidad. Según agregó, “la Udelar sigue creciendo a mayor ritmo que lo que lo hace la población de referencia en el país”, o sea, quienes son sus potenciales estudiantes.

Si se analiza la composición de matrícula por los servicios organizados en áreas de conocimiento, Fiori explicó que no se registraron muchas variantes en relación a 2012; en 2018, el Área Social y Artística tuvo cerca de 40% de la matrícula, seguida por el Área de la Salud con 32%, mientras que el Área de Tecnologías, Ciencias de la Naturaleza y el Hábitat tuvo a 22% de los estudiantes. La facultad que tiene mayor matrícula es la de Ciencias Económicas y de Administración, con 26.227 (17% del total), seguida por la de Medicina –si se incluye a los estudiantes de las escuelas que dependen de ella– con 20.937 (13,5% del total), Derecho con 16.257 (10,5% del total), Psicología con 13.520 (8,7% del total) e Ingeniería con 10.979 estudiantes (7,1% del total). Por su parte, 10,2% de la matrícula de la Udelar cursa en servicios que se encuentran en el interior del país y 29,6% reside fuera de la capital, por lo que una porción importante de estudiantes se traslada a Montevideo para tomar cursos.

En suma, la matrícula continúa feminizada, ya que está compuesta por 36,8% de varones y 63,2% de mujeres, mientras que la edad promedio de estudiantes universitarios es de 26 años y 50% tiene 24 años o menos, y un porcentaje similar vive con al menos uno de sus padres. Por su parte, 87,5% no tiene hijos, 7,1% tiene un hijo, 4% tiene dos y 1,4% más de dos. Los datos de ascendencia étnico-racial muestran que 84,4% percibe que la blanca es la principal, seguido por quienes creen no tener ascendencia (4,4%), luego por la afro o negra (3,9%) y por la indígena (3,5%). Un dato que diferencia a la Udelar de otras universidades del mundo es que 53,7% de sus estudiantes trabaja y casi la mitad de ellos lo hace durante 40 horas semanales o más.

En cuanto a la trayectoria preuniversitaria, 48,6% de los estudiantes es la primera generación de universitarios en su familia, cifra que cayó levemente en relación a 2012, pero que sube a 54% entre quienes entraron a la Udelar el año pasado. Mientras tanto, 58% hizo toda su trayectoria educativa previa en el sector público. Si se hace un análisis a partir de los distintos quintiles de ingreso, la participación en la universidad creció en todos los quintiles en relación a lo que ocurría hace seis años y, según explicó Fiori, se incrementó en mayor medida en los quintiles de menores ingresos.

El rector de la Udelar, Rodrigo Arim, señaló que los datos son útiles para elaborar líneas programáticas “que permitan diseñar un pedido presupuestal transparente, claro y pertinente, en un contexto en el que Uruguay ha enlentecido su inversión en la educación terciaria y superior”. “Tenemos que salir a convencer al país de la importancia que tiene invertir en la Udelar, en clave de democratizar el acceso a la educación terciaria y superior”, agregó.