El futuro equipo del MEC se reunió con el de la Udelar y el centro fue la ley de urgente consideración

El rector de la Universidad de la República (Udelar), Rodrigo Arim, y el futuro responsable del Ministerio de Educación y Cultura (MEC), Pablo da Silveira, se reunieron por primera vez en la tarde de este miércoles en una instancia pactada hace meses con agenda abierta, pero que terminó centrada en “los aspectos que más preocupan” a la Udelar sobre la ley de urgente consideración (LUC), según comentó Arim a la diaria. Las delegaciones fueron grandes; Arim fue acompañado por los prorrectores y varios decanos en representación de las distintas áreas científico-tecnológicas de la Udelar, mientras que por el gobierno electo estuvieron Robert Silva, quien dirigirá el Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), junto con el futuro director general del MEC, Pablo Landoni, y el futuro director de Educación, Gonzalo Baroni.

Elimina potestad para reválidas

La Udelar presentó sus preocupaciones en tres temas. En primer lugar se trataron los cambios que establece el anteproyecto en el sistema de reválidas y reconocimiento de títulos. El borrador de la LUC elimina la potestad de la Udelar de revalidar títulos y se la otorga al MEC. “Sobre eso Da Silveira reconoció que era necesario encontrar algunos mecanismos de transición y también corregir algunos errores”; uno de ellos es que se eliminó la potestad de la Udelar pero se mantuvo la de la Universidad Tecnológica (Utec). El objetivo de este cambio, desde la óptica de las futuras autoridades, es “ubicar el reconocimiento de títulos en un plano más general, que no dependa de una universidad, con un criterio de amplitud”. “A mí lo que más me preocupa, más allá de las modificaciones a la Ley Orgánica –sobre las que entiendo que hubiese sido pertinente que nos consultaran previamente–, es que convergiéramos en un sistema de reválida y reconocimiento de títulos que terminara dificultando todo el proceso, fundamentalmente para los inmigrantes”, sostuvo el rector. Da Silveira se mostró abierto a recibir sugerencias sobre la operativa futura del sistema y los contenidos de la ley.

Limita la gestión del presupuesto

Un segundo conjunto de preocupaciones son los artículos del borrador que modifica el Texto Ordenado de Contabilidad y Administración Financiera y que, a juicio de Arim, generan “restricciones” y terminan por volver “más rígidos” los procesos de gestión de la Udelar. El rector puso dos ejemplos. El primero es la eliminación de la excepción de compra directa del Estado para equipamiento científico por hasta diez millones de pesos, una excepción que está vigente desde 1997 y que es “muy importante para la Udelar”, ya que “si tiene que recurrir a los mecanismos de compra regulares para el Estado se hace casi imposible construir, por ejemplo, un laboratorio, porque son instrumentos muy específicos, que no se venden en plaza y la Udelar importa. Es muy difícil entender esa eliminación”. Otro cambio es que las fundaciones de la Udelar, como la Fundación Ricaldoni, dejan de estar habilitadas para la contratación directa por parte del resto del Estado.

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En paralelo, dijo Arim, el anteproyecto habilita a las universidades autorizadas por el MEC, las privadas, a ser objeto de contrataciones directas por parte del Estado. “Se genera un espacio de falsa competencia, que en realidad no existe, porque la Udelar está mucho más restringida en los instrumentos que tiene”, opinó el rector, que afirmó que el cambio de las reglas del juego genera “dificultades operativas para el funcionamiento de la Udelar”. Arim aclaró que no cree que esos cambios tengan la intencionalidad de disminuir la capacidad de la Udelar frente a las universidades privadas, pero que el resultado final termina siendo ese.

El rector aseguró que desde el futuro MEC se mostraron abiertos a conversar sobre el tema e incluso ofrecieron reunirse con otros actores del Poder Ejecutivo, en particular integrantes del futuro Ministerio de Economía y Finanzas; y desde la Udelar lo aceptarán como forma de caminar hacia el diálogo “para intentar destrabar esta situación”.

Elimina el SNEP

El tercer conjunto de preocupaciones que planteó la Udelar se relaciona al actual Sistema Nacional de Educación Pública (SNEP). Arim puntualizó que hay “diferencias conceptuales muy importantes” con lo planteado en la LUC, que para la Udelar “son de un alto nivel de prioridad”. El anteproyecto propone la eliminación del SNEP y lo sustituye con un espacio de coordinación más general con representación no sólo del MEC sino de todos los actores públicos y privados relacionados a la educación.

Arim reconoció que el SNEP “pudo haber tenido falencias en su aplicación cotidiana y puede que no esté funcionando con la agenda razonable para mejorar el sistema, pero también es cierto que a partir de esta eliminación no existen espacios formales de articulación entre los que son los organismos responsables de las políticas públicas en educación”.

Más allá de que Da Silveira se mostró “abierto a tener instancias de coordinación con la Udelar”, Arim piensa que la falta de un “espacio institucional específico cuya finalidad sea la coordinación de las decisiones y la planificación estratégica de la ANEP, la Udelar y la Utec” es un cambio “problemático”, y agregó que se corre el riesgo de que se conviertan en “instancias ad hoc, no regladas, que dependan de la voluntad de los actores circunstanciales”.