A las 11.00 tendrá lugar la reunión entre las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) y una delegación de la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza del Uruguay (CSEU) para conversar sobre el regreso de las clases presenciales en 973 escuelas rurales del país. Así lo resolvió este lunes el Consejo Directivo Central (Codicen), que además solicitó al Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP) un informe sobre la realidad “escuela por escuela”, para poder tomar decisiones con esa información, en acuerdo con el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae).

Según comentó Juan Pérez, consejero del Codicen electo por los docentes, el informe que se solicitó al CEIP tendrá información sobre la cantidad de alumnos en cada escuela, si los docentes, auxiliares y alumnos se desplazan en transporte público, las condiciones edilicias y de conectividad, entre otros puntos. Con esta información, “el Sinae determinará si están dadas las condiciones para el retorno de las clases”, añadió el consejero, quien el sábado divulgó un comunicado en el que manifestó su “total desacuerdo en movilizar a más de 1.500 funcionarios que incluyen a maestros y funcionarios de gestión de educación primaria, así como a más de 13.000 escolares, rompiendo de esta manera la cuarentena sanitaria”.

En diálogo con la diaria, el consejero opinó que en este momento “no están dadas las condiciones”, y manejó en particular la opinión de la Sociedad de Medicina Rural del Uruguay (Someruy) y de la Federación Médica del Interior (Femi), que junto con el Sindicato Médico del Uruguay (SMU) se manifestaron en contra del retorno a las clases en los entornos rurales. “Mientras existan referentes desde el punto de vista sanitario que creen que no están dadas las condiciones voy a respetar lo que dicen los profesionales”, afirmó.

El pedido de analizar el escenario de retorno de las clases presenciales en las escuelas rurales fue del Poder Ejecutivo al presidente de la ANEP, quien se reunió con los integrantes del CEIP el martes 7. En el encuentro se planteó que no comenzaran las clases en las escuelas de Canelones debido a la cantidad de alumnos que concentran, y se resolvió pedirle un protocolo a la división Salud de la ANEP para tomar las precauciones necesarias en los centros educativos. También se sugirió minimizar la presencialidad, es decir, que la jornada escolar fuera menor a lo habitual y que los niños no vayan todos los días de la semana. Además, se acordó mantener el criterio de que en las escuelas no se elaboren los alimentos para el almuerzo, para disminuir riesgos. En todos los casos, se planteó que existiera un informe previo del Sinae que diera garantías sobre los aspectos sanitarios.

Revisar

La CSEU, que se reunió el sábado, manifestó el respaldo a la decisión de la Federación Uruguaya de Magisterio-Trabajadores de Educación Primaria (FUM-TEP) de rechazar el retorno a clases y también pidió que la ANEP revise la medida. Además de mencionar “flagrantes contradicciones e incoherencias” con el mensaje de “Quedate en casa”, el secretariado ejecutivo de la FUM-TEP argumentó que los docentes, funcionarios y muchos niños se trasladan en transporte público interdepartamental, agregó que no todas las escuelas cuentan con condiciones edilicias adecuadas y cuestionó que los trabajadores no fueron consultados antes de la resolución. La CSEU marca esto último también en su comunicado: “La decisión de retomar las clases en forma presencial se adopta sin haber convocado a los trabajadores a discutir previamente las condiciones de salud y ambiente laboral, lo cual implica discutir, sustantivamente, aquellas condiciones mínimas que pongan a resguardo la salud de estudiantes y trabajadores”. Solicitan tanto una reunión con ANEP como con las autoridades del Sinae, para “conocer de primera mano los argumentos epidemiológicos que habilitan la resolución adoptada del retorno a las clases presenciales a nivel de las escuelas rurales y cuáles son las medidas que se han adoptado para poner a resguardo la salud de los actores involucrados”.

En la noche de este lunes la FUM-TEP se reunió con dirigentes de Femi y Someruy para discutir estrategias en conjunto y presentar su postura al Poder Ejecutivo. “Hay muchos argumentos, desde distintas ópticas, que dan cuenta de lo inoportuno de la decisión” de retomar las clases el 22 de abril, comentó Elbia Pereira, secretaria general de la FUM-TEP.