“Nosotros seguimos trabajando en abrir las escuelas rurales, que fue lo que nos indicó el Sistema Nacional de Emergencias [Sinae], no tenemos ninguna otra indicación”, afirmó a la diaria Pablo Caggiani, integrante del Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP). La Asociación de Maestros (Ademu) de Montevideo cuestionó en un comunicado las versiones del comienzo de clases presenciales en escuelas urbanas para el 4 o 6 de mayo, algo que Caggiani descartó de plano: “El trabajo que requiere abrir las instituciones con el protocolo establecido por las autoridades hace muy difícil poder pensar en abrir más escuelas la semana que viene”.
Según indicó el consejero, Primaria no está haciendo relevamientos sobre cuántas maestras y auxiliares de las escuelas urbanas presentan factores de riesgo, porque “no se puede avanzar sobre el total de las escuelas del país si de repente hay una escuela que va a arrancar dentro de dos meses o no se sabe cuándo. Estamos trabajando con las escuelas que nos confirman que van a arrancar, que por ahora son las rurales”.
Caggiani aseguró que Primaria no tiene conocimiento de la intención del Ministerio de Educación y Cultura de abrir las escuelas especiales en una próxima etapa, tal como informó El País. De todas formas, el consejero opinó que no sería “lo más adecuado”, en tanto las escuelas especiales requieren muchas veces una asistencia personal mayor.
Sin protocolo
Este miércoles se habilitan 367 escuelas rurales más, que se suman a las 434 que han abierto desde el miércoles 22. Una de las condiciones que pidió Primaria al Sinae fue la elaboración de un protocolo específico para la movilidad de niños en el transporte colectivo, pero hasta este martes no había respuesta. Asimismo, Caggiani confirmó que “hay lugares donde los ómnibus de línea no llegan”; ante esta situación la Administración Nacional de Educación Pública se hace cargo del traslado de algunos docentes, pero, según el consejero, “si se siguen abriendo escuelas, el transporte no va a alcanzar”.
Este martes el porcentaje de asistencia a las escuelas rurales fue de 21,3%. De las 543 escuelas habilitadas para abrir, lo hicieron 298, y a 139 de ellas no asistieron niños. Estas cifras se mantienen relativamente estables en comparación con la semana pasada, cuando la asistencia rondó 30%.