La abogada, maestra y escritora Alba Roballo; las poetas Amanda Berenguer, Delmira Agustini e Idea Vilariño; la fundadora de Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos Luz Ibarburu; la médica cirujana, primera uruguaya en graduarse con un título universitario e impulsora de la educación sexual, Paulina Luisi. Estos son algunos de los más de 30 nombres de mujeres que fueron propuestos por la comunidad de la escuela 83, ubicada en Simón Bolívar y Rivera, en Montevideo. La idea es sustituir el nombre actual de la escuela: Martín R Echegoyen, quien presidió el Consejo de Estado una vez instaurada la dictadura. Al año de que falleció, la escuela pasó a llevar su nombre.

“El principal argumento de rechazo es que va en contra de los valores de la escuela, que son democracia, igualdad y participación”, dijo a la diaria Pierino Russomanno, integrante de la Comisión Fomento de la escuela. En tanto, en la primera reunión de la comisión del año surgió la iniciativa de cambiar el nombre, aunque había una trayectoria de intentos que quedaron truncos.

Russomanno contó que en el transcurso del año y mientras maduraban la idea, se enteraron de que paralelamente también había vecinos y exalumnos organizados con la misma iniciativa. Fue así que llevaron a cabo una comisión extraordinaria con la comunidad del barrio y allí se unificaron las propuestas: se decidió que el nombre de la escuela debía ser de una mujer y que la iniciativa ya no fuera sólo de los padres y madres de la Comisión Fomento, sino algo “más popular”.

Armaron un formulario para que quien quisiera pudiera proponer un nombre, con los únicos requisitos de que fuera mujer y de que llevara “al menos diez años de fallecida, porque eso es lo que está en los reglamentos para designación”. Asimismo, Russomanno explicó que la propuesta iba acompañada de quién la hacía y el por qué de esa elección. Llegaron casi 40 propuestas y finalmente quedaron dispuestas al voto 21, con una pequeña bibliografía y acceso a un link para que quien votara pudiera tener información al respecto.

Una semana más tarde -el lunes de esta semana-, en el patio de la escuela votaron 290 familias, de un padrón de alrededor de 470 niños. Con 34 votos, Paulina Luisi fue la candidata más votada, seguida de Luz Ibarburu y Luisa Luisi.

El miércoles, en el club Casal Catalá, se realizó una asamblea con vecinos, exalumnos, docentes y miembros de la Comisión de Fomento para llevar el nombre acordado y escuchar sus propuestas. “Por consenso se llegó a que se votara a Paulina. Porque es mujer, porque ha sido una impulsora de los derechos de las mujeres, de los feminismos en Uruguay, y porque está relacionada con la ciencia y la educación, que era algo que querían tratar para reconocer el trabajo de las mujeres en la educación pública”, explicó Russomanno.

Según narró, hubo algunos vecinos que argumentaron que el interés por el cambio de nombre se trata de una “reparación democrática”. “Es una escuela que tiene gran participación de las familias en la Comisión Fomento, entonces, vos notás que está esa herida, a las personas que están identificadas con la escuela les duele fuertemente y desde siempre”, aseguró.

Russomanno explicó que ahora tienen que elaborar un documento con la argumentación del cambio y del proceso de elección, presentarlo a la Dirección de la escuela, de allí va a Primaria y, si no hay ningún reparo, la propuesta se eleva a la Comisión de Educación y Cultura de la Cámara de Representantes para que sea considerada. “No sabemos cuán viable es, pero sí es bastante factible, porque no sólo pedimos el nombre porque no nos guste, hay muchos antecedentes sólidos: el rechazo enorme por ese nombre, la comunidad está empujando”, concluyó.