Durante su visita en España para concurrir a la Conferencia de Educación Superior que entre mañana y el viernes organiza Unesco, el rector de la Universidad de la República (Udelar), Rodrigo Arim, visitó la Facultat de Medicina de la Universitat de Barcelona para “ampliar” el vínculo con esa institución. En ese marco, recorrió el Hospital Clínic junto con Ricard Cervera, vicedecano académico de ese centro y también responsable de relaciones internacionales, y su decano Antoni Trilla, para recoger ideas para el futuro Hospital de Clínicas, que se estima reestructurar para 2030, según lo planteado por el presidente Luis Lacalle Pou al propio rector.

Para Arim, esta institución se trata de una de las “principales” de España y “sin duda” una de las más “prestigiosas” en el área de medicina. En ese sentido, el rector valoró que en el centro universitario público “hay una historia rica” que “tenemos que recoger, valorizar y entender” desde la “lógica” de la Udelar para poder “planificar el futuro” del hospital universitario.

En un video que difundió, el rector mencionó características que hacen a la fortaleza del Clínic. Algunas de ellas, dijo, son de índole estructural: “Están un poco lejos de la realidad actual de Uruguay, pero quizá debemos incorporarlas como elementos a pensar a la hora de razonar un nuevo Hospital de Clínicas para nuestro país”.

Para el rector, el hospital catalán “literalmente abraza” a la Facultat de Medicina. “El núcleo central de la facultad fue construido, al igual que en Uruguay, a comienzos del siglo XX y a la misma vez que se construía ese centro a su alrededor se construía el hospital universitario”, informó, y agregó que lo unen “distintos puentes físicos, simbólicos y también académicos” que permiten un funcionamiento integrado de ambos espacios institucionales como la clínica universitaria, la investigación y la formación.

Luego, sostuvo, el desarrollo edilicio llevó a la construcción de otro campus y otros hospitales universitarios que complementan al Clínic. “Me resultó llamativo esta concepción temprana de unión física articulada entre la facultad y el propio hospital universitario”, apuntó.

Ya pensando de cara al futuro del Hospital de Clínicas, Arim dijo que hay un conjunto de “lecciones” que le parece “relevante valorizar y poner sobre la mesa” en este momento tan particular, cuando se puede encarar un proceso de “reestructura, refuncionalización y reconstrucción” del hospital.

Respecto al financiamiento del centro de salud, indicó que le pareció “interesante” que el Clínic tenga su presupuesto basal en su inserción en el sistema de atención sanitario de Cataluña. “Es parte de ese sistema. De hecho, tiene georreferenciada a una población del entorno de 500.000 personas que viven en el entorno del hospital, que se atienden en forma natural a partir de la seguridad social en el hospital universitario. En función de eso recibe una serie de recursos”, expresó, y planteó que esa idea, que es una reivindicación en los últimos años, se puede replicar en Uruguay en un futuro.

El Clínic recibe recursos provenientes de la investigación, de la formación docente o de la venta de servicios, como pasa en el Clínicas. No obstante, Arim destacó que el núcleo central de su financiamiento “no descansa” en el presupuesto de la universidad, sino que lo hace “en el supuesto del sistema sanitario de Cataluña”, algo que consideró como un “elemento sustancial que debemos comprender”. “No es razonable ni viable pensar el desarrollo de un Hospital de Clínicas con las dimensiones y características que el país necesita si no lo insertamos en forma fecunda y sólida en el sistema de atención sanitaria del Uruguay”, insistió.

Arim señaló que el Clínicas hoy tiene un conjunto de inserciones “relevantes”, pero que “la estructura de financiamiento central sigue estando apoyada en la vida universitaria”, a diferencia de lo que sucede en Barcelona. “En esta lógica de articulación entre la formación clínica y el propio hospital, la Facultat de Medicina tiene clínicas muy tempranas. Casi que desde el comienzo de los cursos los estudiantes se vinculan con la actividad clínica”, valoró.

El rector sostuvo que “no hay” hospitales universitarios de “fuste” que funcionen “exclusivamente” financiados por presupuesto de las universidades. “Su funcionamiento basal tiene que ver con su inserción en forma clara en los sistemas sanitarios en los cuales recibe un presupuesto que sostiene el funcionamiento; y el presupuesto universitario funciona en el margen de ese presupuesto basal”, añadió.

A la inversa, Arim sostuvo que los recursos que el Hospital de Clínicas obtiene de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) u otras actividades “son complementarios”. Asimismo, indicó que hay una “necesidad” de que la formación en salud “no dependa exclusivamente” de las estructuras universitarias.