Ante el paro que se realizará este miércoles en todas las ramas de la educación, la Dirección General de Educación Inicial y Primaria (DGEIP) acordó con la Federación Uruguaya de Magisterio (FUM) que se cumpla con el servicio de alimentación para aquellos niños que están inscriptos en el Programa de Alimentación Escolar.
Para ello, se plantearon distintas estrategias. En las escuelas que estarán abiertas estará el servicio de comedor “normal”, mientras que para aquellos centros educativos que estén cerrados en cada jurisdicción se determinará sedes habilitadas para la entrega de menús de emergencia o viandas, según corresponda (ver recuadro). La entrega del menú de emergencia o viandas se hará de 12.30 a 13.00, se aclara en la circular de la DGEIP.
En tanto, en las escuelas rurales que estén cerradas se entregará un ticket de alimentación por cada alumno. Desde el subsistema dirigido por Graciela Fabeyro pidieron a las familias “estar atentos” a las comunicaciones que se realizarán a través de la página web y de cada Inspección Departamental de Educación Inicial y Primaria, donde se publicará el listado de las escuelas sede.
La previa
El servicio de comedor escolar fue tema de debate durante los últimos días, una vez que se conoció que este miércoles los sindicatos de la educación iban a parar. Alexandra Inzaurralde, diputada blanca, planteó al Poder Ejecutivo un proyecto de resolución para que declare la esencialidad en el servicio, pero la medida se descartó una vez que la FUM comunicó que habrá guardias gremiales. Previo a la decisión del sindicato de maestros, la oposición y los gremios calificaron la idea como “oportunista” y “abusiva”.
Robert Silva, presidente del Consejo Directivo Central de la Administración Nacional de Educación Pública, consideró que “es una muy buena cosa que estemos juntos en esto” y que como organismo lo celebran.
En tanto, el ministro de Defensa Nacional, Javier García, había dicho que las Fuerzas Armadas estaban “listas” para darles de comer a los gurises si los sindicatos optaban por no brindar una guardia gremial. “Hablé con Robert Silva y con Graciela Fabeyro y les dije: ‘si el miércoles ustedes ven que puede haber un problema con la alimentación de los gurises me avisan rápido que las Fuerzas Armadas están prontas para coordinar los comedores’”, indicó, según recogió el portal LR21.
Por su parte, el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, expresó que “primó la cordura” e indicó que “hay que valorar” que el sindicato haya “rediscutido internamente” para que haya un “cambio de posición sobre negarse a hacer guardias gremiales”. “Me preocupaba muchísimo que por un paro por las dudas dejaran a 32.000 gurises sin comida; hay que valorar ese cambio de posición, me parece que va en sentido de lo lógico y de pensar en los más vulnerables”, sostuvo.