El Sindicato de Docentes de Formación en Educación (Sidfe) realiza un paro de 24 horas este miércoles y se declaró en preconflicto. El Sidfe apunta contra la política llevada adelante por el Consejo de Formación en Educación (CFE), al que acusan de “rebajar la calidad académica” de los cursos en los que se forman los futuros docentes y educadores.
Según afirman en un comunicado, durante el paro se realizará una instancia de negociación bipartita con el CFE y por ello convocan a concentrarse en las afueras del organismo a las 9.30.
El sindicato enumera una serie de reivindicaciones, como el cese de los “abusos de poder” y la “persecución sindical” que, según consideran, son llevados adelante por las autoridades políticas en el CFE. Al mismo tiempo, cuestionan que el organismo siga insistiendo con el pedido de reconocimiento universitario de los títulos de varias de sus carreras ante el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) después de que la cartera haya archivado la solicitud. Al respecto, el sindicato entiende que el CFE “se deja humillar” por el MEC.
El Sidfe también cuestiona que la Transformación Curricular en el organismo ha implicado la reducción de 60 asignaturas, más allá de que las autoridades reivindican que los nuevos planes cuentan con más horas docentes que los anteriores. Además, el sindicato cuestiona que se hayan fusionado profesorados “sin criterio pedagógico”, en alusión a la unión de Derecho y Sociología.
Por su parte, siguen cuestionando el nuevo mecanismo de elección de horas en el CFE, a través de las unidades horarias de desempeño docente (UHDD) creadas el año pasado. Si bien el presidente del organismo, Víctor Pizzichillo, afirmó que son 250 los docentes que quedaron afuera del CFE a raíz del nuevo mecanismo, el sindicato sigue sosteniendo que se trata de 1.000 docentes. A su vez, el Sidfe cuestiona que las UHDD “han destruido” las posibilidades de realizar tareas de investigación y extensión, y también afecta la especialización de los docentes.
El sindicato cuestiona el actual proceso de elección de horas y cargos y, en particular, señala que el CFE “desconoce” un listado de ordenamiento docente de 2019 que debería regir en dicho proceso. Por todo ello, el Sidfe reclama que se mantengan los “derechos emergentes” de esos listados y que se habilite a los jubilados reintegrados a presentarse a llamados a aspiraciones. Además, plantea la necesidad de eliminar el sistema de UHDD.
En el mismo sentido en que semanas atrás se pronunció la consejera docente en el organismo, el Sidfe reclama la convocatoria a una instancia de “negociación real” sobre los cambios en el Estatuto del Funcionario Docente de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) que pretenden realizar las autoridades del CFE.
¿Qué plantea la propuesta del nuevo Capítulo XIV del estatuto docente de ANEP?
Según explicó Pizzichillo a la diaria, el borrador del Capítulo XIV del estatuto va en un sentido distinto a los cambios que habían sido aprobados por el Consejo Directivo Central de la ANEP en 2019. Al respecto, detalló que actualmente el CFE tiene un sistema por el que la efectividad de los docentes cae a los diez años de haber concursado y no está previsto un mecanismo de renovación. Si bien señaló que el consejo cuenta actualmente con efectividades que están vigentes desde 1999 y, por tanto, se han venido prorrogando, ese mecanismo genera una “sensación de inestabilidad” en los docentes de la institución.
En ese sentido, la propuesta de las actuales autoridades no implica pasar a un sistema de cargos docentes sino que la efectividad tenga una mayor permanencia y que el pasaje al siguiente grado no sea por antigüedad, como en la actualidad, sino a través de la realización de “instancias de formación permanente que el CFE determinará”. Según detalló, en caso de no realizar ese tipo de formaciones la efectividad no se perdería, pero el docente queda inhibido de “avanzar en su carrera funcional”. Además, el jerarca aseguró que la propuesta actual deja en claro los mecanismos de evaluación docente.
Pizzichillo cuestionó la versión de cambio aprobada en 2019, y que luego el actual gobierno dejó sin efecto, porque sólo preveía la creación de 165 cargos en el organismo, que, además, no contaban con financiamiento. Al respecto, planteó que “sólo algunos” iban a poder acceder a los cargos y lo contrastó con las UHDD, a las que todos los docentes pueden acceder. Por su parte, el jerarca cuestionó la estructura jerárquica de cargos que creaba la propuesta de 2019 y, en particular, que quienes estaban arriba “cortaban todo el bacalao” y ello generaba “poca libertad” para el resto de los docentes.
En ese sentido, defendió la propuesta al plantear que la estructura será “más descentralizada, más democrática y no concentrada en la figura de un coordinador o de un grado 5”. Si bien no está prevista en la propuesta del nuevo capítulo del estatuto, Pizzichillo planteó que sí se prevé la creación de unidades de apoyo docente a nivel territorial para los distintos institutos y centros de formación docente de todo el país.