A modo de balance sobre lo sucedido en materia educativa en el actual período de gobierno, las mesas permanentes de las asambleas técnico docentes (ATD) de Primaria, Secundaria y Formación en Educación días atrás emitieron una declaración en la que también plantean los puntos que reclaman al próximo gobierno.

Las ATD han rechazado los cambios curriculares que impulsó la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) en el último quinquenio y denunciaron en varias oportunidades que sus planteos no fueron tenidos en cuenta a lo largo del período. En ese sentido, en la declaración afirman que los jerarcas del actual gobierno “arremetieron contra la educación pública, los derechos y la profesión docente”, pero señalan que, pese a ello, “hoy las ATD se encuentran fortalecidas”.

Al respecto, afirman que desde dichos ámbitos se generaron diversos espacios de “reflexión, intercambio y análisis sostenido” para abordar la situación que tuvo que afrontar la educación pública durante este quinquenio. “En este escenario, se han podido identificar preocupaciones comunes, reforma y recortes, vulneración de los derechos de las y los trabajadores de la educación pública, así como de sus estudiantes”, sostienen.

Sobre la gestión en la ANEP en los últimos años, las ATD dicen que se efectuó un recorte de 260 millones de dólares y que la administración nunca ha llegado a ejecutar el 100% de lo ejecutado, en la misma línea de lo que han planteado otros análisis presupuestales, que mostraron que el porcentaje de ejecución fue en descenso desde 2020.

Agregan que la falta de presupuesto se ha sentido tanto en lo pedagógico como en lo edilicio, pero también por “la carencia de recursos didácticos y el recorte de grupos que ha redundado en la pérdida de horas docentes y el aumento de estudiantes por grupo”. Las ATD señalan que, sumado a la pérdida de salario real, eso repercutió en un aumento de “la sobrecarga laboral, el estrés docente y el multiempleo”. “Nadie que analice el tema con honestidad intelectual puede afirmar que es posible mejorar la educación, o que se trata de una prioridad nacional, cuando se le recortan recursos”, lamentan.

Sobre la transformación educativa, afirman que “ha intentado silenciar por completo a sus principales actores y que atenta contra las propuestas educativas en todos los niveles de enseñanza pública”. En esa línea, plantean que desde la ANEP se reprimió y se “fomentó la autorrepresión” de los docentes, algo que se vio materializado en los distintos subsistemas por medio de “sumarios, la burocratización y el control a quienes educan”.

En otros planos, las ATD sostienen que en este quinquenio existió un “repliegue” del Estado en los distintos territorios y, en ese marco, dicen que es inadmisible que en la actual situación social se hayan hecho “ajustes en las políticas económicas y sociales que inciden directamente sobre las políticas educativas”. Al respecto, denuncian que “el Uruguay actual está atravesando una profundización de las desigualdades” a nivel social, algo que se ve “en la vida de las infancias y adolescencias” y “también en sus procesos de aprendizaje”. “Todo lo que nos pasa como sociedad se expresa en nuestros centros de estudio”, sostienen.

Las mesas permanentes de las tres ATD afirman que los docentes sienten “cada problema, cada angustia y cada dolor del estudiantado” y que ese sentimiento los impulsa a la acción. En ese sentido, afirman que “la participación social de los y las docentes es un elemento característico” en la historia y en la forma de educar de los docentes uruguayos.

Reclamos hacia adelante

La declaración pública reclama la necesidad de “recuperar la soberanía pedagógica nacional”, de forma que se promueva “la elaboración genuina y situada, desarrollando toda la potencia de lo que sucede en las aulas, y también dar lugar a lo que es preciso crear”. Para que eso ocurra, las ATD afirman que “Uruguay debe confiar en sus docentes y dejar de salir a comprar manuales y recetas de los organismos internacionales de crédito”.

“La educación pública de nuestro país está integrada por docentes con formación profesional, lo que nos permite interpretar la política educativa y reelaborarla creativamente, con criterio propio, en función de las circunstancias específicas y de acuerdo a la realidad de las y los estudiantes concretos con quienes compartimos los espacios educativos. Esto implica apostar a docentes con potencia teórica, capacidad crítica y compromiso con la realidad social”, plantean las ATD, que sostienen que ese es parte de su “compromiso histórico”.

En la declaración también sintetizan una serie de reivindicaciones que las ATD exponen de cara al corto plazo, en un contexto en el que en un par de meses asumirá un gobierno del Frente Amplio (FA). En concreto, reclaman una asignación presupuestal equivalente al 6% del producto interno bruto para la educación y 1% adicional para investigación, algo que el programa del FA también plantea.

Además, reclaman la “suspensión inmediata de la transformación educativa” y, en esa línea, también piden que se convoque de forma urgente a las ATD de todos los subsistemas de la ANEP para que “se inicie el diálogo educativo nacional que nunca se debió perder y se profundice el reconocimiento a la participación de las ATD en las acciones de la política educativa”. Al respecto, están de acuerdo con la convocatoria a un congreso nacional de educación cuyas resoluciones sean vinculantes para las decisiones políticas en la materia y piden que se restablezcan los consejos con participación docente en los subsistemas de la ANEP. Como otra medida para garantizar la definición de políticas de Estado, las ATD reivindican la autonomía y piden la instalación del cogobierno en la gobernanza de la educación.

A nivel de la formación docente, reclaman la derogación del artículo de la ley de urgente consideración que creó el mecanismo de reconocimiento universitario de títulos a cargo del Ministerio de Educación y Cultura (MEC). En ese sentido, reiteran la necesidad de que se cree una universidad de la educación “autónoma, cogobernada y en clave de derechos humanos, que se aboque a las funciones de enseñanza, investigación y extensión”.

Al igual que lo hizo la consejera docente en el Consejo de Formación en Educación (CFE), Nirian Carbajal, las ATD piden que se detengan y revisen los cambios que promueve el actual gobierno sobre el capítulo XIV del estatuto docente de la ANEP, que regula a la formación docente.

Por su parte, igual que los representantes docentes en el Consejo Directivo Central de la ANEP, reclaman que no se aplique el decreto que actualiza la normativa sobre universidades privadas, emitido por el MEC en noviembre.