Una vez más el nombre del reconocido actor francés Gérard Depardieu está en las portadas de los medios, esta vez tras haber sido acusado por 13 mujeres de ejercer violencia sexual contra ellas durante los rodajes de 11 películas filmadas entre 2004 y 2022. Los testimonios, que fueron publicados este martes por el diario digital francés Mediapart después de meses de investigación, describen un modus operandi del actor en los sets de grabación contra mujeres en general más chicas que él, con menos experiencia en el mundo del cine y, sobre todo, menos poder. Las mujeres son actrices, maquilladoras, técnicas, extras y pasantes. Algunas de ellas revelaron su identidad y otras dieron su testimonio de forma anónima.

Todas describieron comportamientos similares: tocamientos en la pierna, entrepierna, los glúteos o el pecho; comentarios sexuales obscenos, e incluso gruñidos o resoplidos consistentes, a pocos centímetros. De acuerdo con los relatos, las situaciones se produjeron a la vista de todos, en algunos casos bajo miradas cómplices e incluso risas.

El medio señaló que nueve de los 20 realizadores y productores contactados no contestaron a sus preguntas, mientras que los otros 11 afirmaron que no fueron informados de comportamientos inapropiados durante los rodajes o que no recuerdan haber visto este tipo de conductas.

“Sin previo aviso, Gérard Depardieu puso su mano debajo de mi vestido, sentí sus dedos tratando de subir sigilosamente para alcanzar mi bombacha”, dijo a Mediapart Lyla, una de las 13 mujeres denunciantes, cuyo nombre fue modificado. Contó que, ante la situación, ella “empujó su mano” pero el actor “siguió adelante, se puso agresivo, trató de quitarme la bombacha y tocarme”.

“Me di cuenta de que no estaba interpretando su personaje. Si no lo hubiera detenido, habría tenido éxito”, relató. Los hechos tuvieron lugar durante la filmación de la película Big House (2015), dirigida por Jean-Emmanuel Godart, en la que Depardieu interpreta al dueño de un burdel. En ese entonces, Lyla tenía 24 años y trabajó como extra.

Depardieu, que hoy tiene 74 años, fue imputado en 2021 por violación y agresiones sexuales tras la denuncia presentada por la actriz Charlotte Arnould. Tres de las mujeres que hablaron con Mediapart, incluida Lyla, llevaron su testimonio a la Justicia para contribuir con el caso de Arnould, pero ninguna presentó denuncia, por sentir que “su palabra pesaría poco frente a la de Gérard Depardieu, así como temor a las consecuencias de cualquier denuncia pública en el resto de su carrera”, consignó el medio francés.

El medio que difundió los testimonios asegura que intentó comunicarse con Depardieu para contar con sus comentarios, pero el actor no quiso reunirse con la periodista ni responder a sus preguntas. Su respuesta fue a través de sus abogados, que comentaron al medio que el intérprete “niega formalmente todos los cargos susceptibles de ser objeto de la ley penal”.

Los casos que salieron este miércoles a la luz en Francia vuelven a poner en evidencia la necesidad de que en los rodajes haya una figura encargada de que todas las personas involucradas estén cómodas y también prevenir abusos. Es lo que se conoce como “coordinadoras y coordinadores de intimidad”, un trabajo que se tornó más visible, sobre todo, después del #MeToo, y que hoy parece ser imprescindible para erradicar la violencia sexual en la industria audiovisual.